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jueves, 28 marzo, 2024

Recomendaciones para cuidarse del golpe de calor

Ante las temperaturas extremas que estamos padeciendo, es importante cuidarse del sol y el calor para no sufrir lo que se denomina como shock térmico o hipertermia. El doctor Pablo Varrone dialogó con FM Actualidad y brindó algunas recomendaciones para prevenirlo.

 

El golpe de calor es una instancia clínica en la cual el cuerpo supera bruscamente los 40° centígrados de temperatura corporal. El nombre que utiliza la medicina para eso es hipertermia.

El cuerpo tiene varias formas de producir calor: una es interna y otra externa. La interna es a través de los órganos (corazón, hígado, pulmones, músculos, intestinos), y la externa es la piel. «La temperatura interna está regulada por mecanismos muy finos, en los cuales nosotros no tenemos injerencia directa. Pero en la externa sí tenemos una injerencia directa por la exposición al medio ambiente. Nuestra piel está expuesta a 35 o 40 grados de temperatura ambiente. La transpiración es una forma de regular el calor interno, depende que tanto calor haga vamos a transpirar o no. Esa transpiración es agua que sale de nuestras células, por lo tanto cada vez que transpiramos nuestras células se deshidratan rápidamente», comentó Varrone.

El profesional médico agregó: «La manera que tenemos de evitar esa pérdida de líquido por sudoración son dos: primero aumentar el consumo de agua. Tenemos que tomar 30 mililitros por kilo de peso para mantener las células hidratadas.Pero no olvidemos que al producir más transpiración para controlar esa temperatura interna y no llegar a la hipertermia va a ser más excesiva la pérdida de agua, por eso hay que aumentar el consumo de líquido. La otra forma para evitar la pérdida de agua es interponer ropa entre el calor y la piel. Muchas veces estar desnudos es un error porque, si estamos expuestos al sol y no tenemos ropa adecuada, la transpiración aumenta y aparece la posibilidad de deshidratación. Si encima no incorporamos agua, entonces hay más posibilidad de deshidratación. Por eso se recomienda tener una ropa suelta, que permita el movimiento de aire y que sea de colores claros porque repelen los rayos ultravioletas que aumentan el calor».

Varrone también aconsejó no darse baños en agua fría: «En el agua fría automáticamente se produce una vasoconstricción: se cierran los vasos para evitar la pérdida excesiva de temperatura. Al cerrarse la temperatura corporal central queda igual, por lo tanto vamos a tener la piel fría pero por dentro el cuerpo caliente. Tenemos que exponernos a agua de 25, 26 o 27 grados; eso le va a permitir a la piel no vasocontraerse  sino vasodilatarse y permitir la transferencia de calor».

Otra recomendación fue tomar líquidos frescos para disminuir la temperatura interna (evitar las infusiones calientes) y no comer comidas abundantes y calóricas para que el aparato gastrointestinal no tenga que trabajar excesivamente y aumente, de esa manera, el calor corporal interno. Lo ideal es comer frutas de estación que tienen mucho líquido.

Aquellos que están obligados al contacto con el sol más dañino, se recomienda usar ropas claras, holgadas y de algodón, así como ponerse protector solar y gorras que protejan la cabeza.

Los deportistas deberán hacer actividad física temprano por la mañana o por la tarde-noche, con un completo esquema de hidratación.

¿Cuál es la población más vulnerable?

Los niños y los ancianos, ya que tienen más superficie de agua corporal y menor cantidad de grasa corporal. Por ese motivo se deshidratan más fácilmente.

¿Cuáles son los síntomas?

  • Mareos, confusión y/o desorientación.
  • Calambres o debilidad en los músculos.
  • Sequedad de la piel y enrojecimiento.
  • Dolor de cabeza.
  • Aceleración del ritmo cardíaco con latido débil.
  • Confusión o pérdida de conocimiento.
  • Vómitos frecuentes.
  • Problemas para respirar.