Guadalupe Sendón es villeguense, vive en Buenos Aires, lugar donde estudió diseño gráfico y donde desempeña su labor profesional. Desarrolla su carrera en una agencia de comunicación interna hace siete años, trabaja para la Unión de Trabajadores de la Educación, da clases en la UBA en la cátedra de Tipografía y, desde agosto de 2021, forma parte del equipo de la Dirección de Desarrollo Cultural y Creativo que depende del Ministerio de Cultura del gobierno de la ciudad de Buenos Aires, lugar que según ella cuenta, le permite «desarrollar más el lado creativo».
Guadalupe, de 30 años, es hija de María Rosa y nieta de José Luis Chavarri, contemporáneo de Manuel Puig durante su infancia en General Villegas. Ella adora a su abuelo, tanto que aceptó ser entrevistada en radio, por haber diseñado los ploteados sobre el escritor, que se exhibirán en estaciones de subte porteño. «Lo estoy haciendo por él, quiero que lo sepa», asegura en un guiño de complicidad.
«Escucho historias sobre Manuel desde muy chica -confiesa- siempre fue el amigo, el conocido del abuelo. Creo que aunque me costó salir al aire a contar sobre mi trabajo y sobre esta coincidencia hermosa (o no), es una linda forma para que los villeguenses que puedan, se den una vuelta por la Feria del Libro.»
La joven diseñadora cuenta que «cuando me dijeron que había que hacer unos ploteos para la estación de subte Pueyrredón y al abrir los archivos, ví que era a Manuel (Puig), automáticamente lo llamé al abuelo.» Chava (apodo cariñoso con que muchos conocen a Chavarri), ha contado durante muchos años en el seno familiar y fuera de él, la cercanía con el escritor, a quien dijo haber visitado en Río de Janeiro, Brasil.
Los ploteos del subte diseñados por Guadalupe, tienen unos códigos QR que van a permitir leer fragmentos de tres novelas del escritor en la estación Pueyrredón: El beso de la mujer araña, La traición de Rita Hayworth y Pubis angelical.
«Es muy lindo ver las cosas desde el otro lado, lo que se hace como reconocimiento en otros lugares, fuera de Villegas», asegura la joven, quien dice que no podría haber elegido otra carrera que no fuera diseño gráfico. Sobre sus proyectos a futuro, fue directa: «trato de no proyectar mucho porque me gusta disfrutar el proceso. Trabajo en cosas muy diferentes y eso es muy bueno.»
Dice el diccionario que una sincronía es una «coincidencia en el tiempo de dos o más hechos, fenómenos o circunstancias, especialmente cuando el ritmo de uno es adecuado al de otro.» Evidentemente, que entre tantas cosas para hacer desde el gobierno de la Ciudad para la Feria del Libro, que a Guadalupe, villeguense y nieta de José Luis Chavarri, le haya tocado trabajar en los diseños sobre el homenaje por los 90 años del nacimiento de Manuel Puig, es una sincronía. Y el universo siempre sabe por qué conspira para que las sincronías sucedan.