Con casi 15 mil seguidores en Twitter, lugar en el que lo descubrí hace ya varios años, este biólogo de 54 años, que además es comunicador social, es un estudioso de los ritmos biológicos de animales y plantas.
Particularmente, a George le apasionan las hormigas. Desde que tenía 3 años, sintió pasión por el comportamiento de estos insectos que, según él cuenta a través de la red social del pajarito, predicen el clima y se anticipan a los cambios.
Jorge Finardi, conocido en Twitter como @GeorgeClimaPron, estudia los movimientos de las hormigas, los registra, los compara y llega a una conclusión, que en general, suele ser acertada.
Remarca que su método no es científico. Pero sin dudas que es cualitativo y le supone largos tiempos de observación. La trascendencia de su labor está en los fundamentos, las conclusiones y el nivel de certeza que consigue con aquello que comunica a través de la red del pajarito.
Al menos, no se equivocó el sábado pasado en la mañana, cuando dijo que el domingo iba «a haber solcito» y no se equivocó tampoco en el mes de marzo, cuando posteó que por el cereal que llevaban a los hormigueros (indicador a largo plazo), se venía un «invierno crudo».
Durante esta segunda vez que hablamos en radio sobre estos «súper organismos que son las hormigas. Son insectos sociales que trabajan mancomunadamente, se ayudan unas a las otras».
Él observa por ejemplo «la velocidad a la que van, la carga que desplazan (ahora llevan cereal, lo que indica que va a seguir el frío, porque al fermentar, da calor dentro del hormiguero); las clases de hormigas que trabajan y la forma en la que hacen el hormiguero.»
«Toda esta observación va aportando datos para inferir lo que puede llegar a pasar, de manera no científica», en esta sociedad muy organizada donde «los que trabajan son los más fuertes.»
“En primer lugar, determino el grado de actividad de las hormigas en una escala del 1 al 10. Para armar la escala tengo en cuenta la cantidad de interacciones entre las hormigas, el número de hormigas involucradas, y el tipo y tamaño de carga que llevan, además, de la clase de hormiga que trabaja”, explica.
Para saber si habrá sol o no, se observa «el tipo de planta que están eligiendo, qué es lo que están podando. Si están apuradas, agarran la primera que tienen a mano y la pelan. Si tienen tiempo para elegir, significa que va a haber buen clima», comenta.
Como una primicia para Actualidad, el experto anunció que «están armando el hormiguero muy fuerte, por lo que en primavera/verano, existe la posibilidad de que vengan lluvias y tormentas importantes. Podría caer mucha agua en poco tiempo» y aclara que «ya lo van a leer y escuchar científicamente.»
Sin embargo, George sabe que cuando las hormigas presienten que viene mucha agua, fortalecen el hormiguero y lo hacen más elevado.
Lo que le llamó la atención desde muy chico, fue «la organización que tienen». Yo hablo de los caminitos de hormigas y enseguida me cuenta que «cuando está por llover, a veces hacen hasta cuatro filas, para acelerar el trabajo» y eso puede indicar futuras lluvias.
George dice que cuando las hormigas «llevan palitos y barritas, es porque tienen que fortalecer el hormiguero, debido a que se aproxima lluvia o frío. Cuando hay movilización de tierra es porque se viene una lluvia fuerte. Cuando llevan cereal, viene frío, porque el cereal fermenta dentro del hormiguero y produce calor para que nazcan los hongos que ellas comen”.
En cambio, cuando se avecinan altas temperaturas, «acondicionan los túneles: las hormigas empiezan a abrir chimeneas, que son como agujeritos esparcidos dentro del hormiguero, que puede llegar a tener metros de profundidad. Cuando pasa eso, se viene una ola de calor”, afirmó.
Jorge Finardi, quien vive en San Pedro y estudió en la UNR (Universidad Nacional de Rosario), no se cansa de remarcar que su método no es científico. Su trabajo tiene base en la etnometodología (investigación empírica de los métodos que utilizan los individuos para dar sentido y al mismo tiempo realizar sus acciones cotidianas), en este caso, aplicada a las hormigas.
Este método de observación continua que lleva adelante prácticamente desde que tiene uso de razón, hizo que también prestara atención a las arañas, porque «tienen la capacidad de detectar actividad eléctrica cuando aparecen y están muy activas», como lo hacen las cigarras «que anuncian calor», o las libélulas que también «pueden anticipar tormenta o viento», y los gallos que «cuando cantan a media noche anuncian neblinas».
*Celina Fabregues es periodista. Conduce Cuidarte Más por FM Villegas, los sábados de 9,30 a 12 horas, programa que se repite a las 19 del mismo día.