La muestra temporaria “Exposición Salamone en General Villegas” se pone en marcha este jueves 9 de marzo, desde las 19 horas, en el Museo Carlos Alonso.
ACTUALIDAD dialogó con Ezequiel Hilbert, director, productor y profesor, quien además fue el director de la película «Mundo Salamone – La reinvención de La Pampa», que se va a proyectar también este jueves a las 20 horas.
«Yo empecé haciendo el documental del arquitecto fascista, que había hecho obras por encargo de Manuel Fresco (médico y político argentino, diputado nacional y gobernador de la provincia de Buenos Aires entre 1936 y 1940 por el conservador Partido Demócrata Nacional), pero investigando -y es un tema que me apasionó durante los 5/6 años que estuve haciendo la película-, resultó que las obras fueron de trato directo con los municipios. Él iba convenciendo a los intendentes o concejales, con una oferta que nadie le podía rechazar, porque en ese momento, después del año ’36, Fresco puso en marcha un plan enorme de obras públicas y entre Salamone y algunos más que supieron de este plan, iban a los municipios y ofrecían renovar obras. Todo se hacía con bonos de la Provincia de Buenos Aires, que si no me equivoco tenían un vencimiento de 20 años. Así logró encargos en 27 localidades distintas», comentó Hilbert.
«En ese momento Fresco estaba de campaña presidencial y su gobernación, plasmada en libros que se llaman ‘Cuatro años de gobierno’, fue justamente muy fuerte en lo que hace a obras públicas. Iba perfecto con Salamone, cuyas obras le dieron identidad a muchas localidades y generan una relación entre muchas de ellas. Desde ese punto de vista, es un aporte importante», agregó.
La obra de Salamone tuvo muchos críticos, pero también hay una especia de recuperación de ese legado. «Cada localidad que tiene una obra del arquitecto la valora. En Laprida por ejemplo hicieron una especie de museo ascendente en la torre del Palacio municipal, con imágenes y demás que uno va mirando a medida que va subiendo; en Balcarce recuperaron el matadero municipal y lo convirtieron en un Centro Cultural. Es muy interesante la restauración que hicieron. Y hay otros mataderos más que han quedado abandonados».
«Hay un arquitecto que se llama Carlos Scarpa, muy respetado entre los profesionales que hablan de conservación de patrimonio. Y él jamás reconstruía nada. Si hacia algo lo hacía bien diferenciado de lo viejo, para que no parezca que alguien quiso volver el tiempo atrás. Las obras de Salamone, en general, se sostuvieron incólumes en todos estos años», agregó.
«Fue el primero en llevar el hormigón armado a la provincia de Buenos Aires y esto es algo que no se habla», destacó Hilbert. «No sólo eso -agregó- sino que como hacía diferentes obras al mismo tiempo, capacitaba gente en cada lugar. Eso hacía que cuando él se iba quedaba gente capacitada para hacer el hormigón, así que parte del legado en la construcción viene de Salamone».
«Mundo Salamone – La reinvención de La Pampa», la película que se va a proyectar en el Museo Carlos Alonso, «habla un poco de sus obras, pero tiene mucho de la vida, del temperamento y de la persona que era, porque su obra está muy relacionada con eso. Él era un tipo muy grandilocuente, se sentía importante y que estaba destinado a hacer grandes cosas. Pero era una persona muy amable por lo que me contaron, ya lo van a ver en el film, que busca al hombre que construyó de una manera muy sólida y muy durable.», adelantó Hilbert.