Una de las personas que tomó la palabra durante la jornada de presentación de los compromisos de Gobierno de la precandidata Romina Dominguez y que forman parte de su equipo de trabajo es Edgardo Beltramone, abogado que, si bien ejerce desde que recibió su título, en Emilio V. Bunge, es oriundo de la localidad villeguense de Santa Regina.
Durante la presentación, el abogado volvió a poner en valor el Preámbulo de la Constitución del que Raúl Alfonsín se aferrara durante su campaña presidencial de 1983 en el regreso a la democracia y se refirió a la importancia de las cooperativas para el desarrollo del distrito.
Durante la visita de ambos en ACTUALIDAD el viernes en la mañana, Romina destacó el recorrido que están realizando por el interior del partido, por pueblos que «están tan cerca, pero tan lejos de la realidad de uno en la ciudad cabecera. Por eso es tan importante acercarse a escuchar y conocer realidades que cuesta dimensionar que pasen: quedar aislados, no tener una una farmacia, un médico. Sin embargo, la gente sigue apostando y sigue quedándose en sus lugarcitos donde tiene el corazón.»
Tras haber pasado ya por el espacio de la radio otros miembros del equipo como Dante Costamagna y Analía Álvarez, la precandidata a intendente por el PRO, definió a Edgardo Beltramone como «un abogado reconocido, con una gran trayectoria, con conocimiento de muchas de las cooperativas eléctricas que a nosotros, para trabajar en este proyecto político y de gobierno nos enriquece a diario.»
Además refirió que es alguien «con muchas ideas, muy asociado a la producción y al desarrollo. Le quita el sueño esto de ver que qué hacer con los pueblos del distrito y cómo generar empleo genuino.»
Que el profesional aceptara sumarse al equipo no fue tarea fácil, sobre todo porque «hacer política hoy es complejo. Sin embargo, cuando este grupo se empezó a conformar Edgardo se sumó a esa mirada que tenemos de la autenticidad, del profesionalismo del ciudadano común y y aceptó el desafío. Hoy está convencido del proyecto que estamos desarrollando y es un lujo tenerlo en el equipo», afirmó Domínguez.
Por su parte, Beltramone mencionó que fue militante estudiantil y de territorio durante la misma época, pero después por las obligaciones de su profesión y «decepcionado por las vicisitudes políticas que hemos tenido en este en este país, había optado por no participar, pero también soy consciente que si nos vivimos quejando de la situación, pero no hacemos nada para cambiarla, le estamos regalando el terreno a aquella gente de la cual nos quejamos.»
«Es nuestro deber cívico, nuestra obligación. Algún principio moral nos debe guiar para tratar de modificar esta situación. Esto es lo que me motiva», señaló.
Sobre esas motivaciones en particular, Beltramone indicó que «como dijo Romina, me desvela el desarrollo. El partido de Villegas es productivamente muy pujante. Además de abogado, soy productor agropecuario y comparto con mis colegas de la producción agropecuaria reuniones, charlas todos los días; mis clientes son productores agropecuarios.»
Y señaló que «los productores agropecuarios del partido son gente muy pujante, que tiene muy en claro que ser eficientes y ser extremadamente productivos es el horizonte hacia hacia el que debemos marchar.»
Según el abogado y productor, los argentinos «podemos tener un montón de defectos, pero la producción agropecuaria argentina está entre las mejores del mundo. No hay diferencia entre lo que produce un farmer norteamericano y lo que produce un productor argentino en nuestra zona núcleo y, a veces, con mucho menos recursos.»
«El productor argentino tiene mucha inventiva, mucha capacidad de cambiar la situación y generar cosas muy importantes y lo que yo veo es que la política no acompaña a esto», señaló.
Para Beltramone, «la municipalidad debe ser una polea de transmisión entre este productor pujante que está entre los mejores del mundo para aportar valor agregado a nuestra producción.»
Enfatizó además que «es increíble los pocos emprendimientos industriales que tenemos a través de la producción primaria. Es increíble que no tengamos un frigorífico, que estemos comprando carne a otras provincias.»
Asimismo se preguntó «¿por qué no podemos tener un frigorífico que nos abastezca y genere puestos de trabajo genuino? Para eso precisamos un gobierno municipal que se ponga al lado de ese emprendedor que quiere tener un frigorífico, que le allane el camino para conseguir los permisos, el lugar para un montón de cosas.»
«Si desde la municipalidad, promovemos el desarrollo y agregamos valor a la cadena de producción primaria que tenemos, podemos hacer un Villegas distinto, que se levante, que sea un lugar digno de ser vivido. Queremos vivir acá, que nuestros jóvenes vuelvan porque van a tener trabajo», apuntó.
En la misma línea, manifestó que a ese desarrollo «hay que generarle la infraestructura necesaria para que esta gente pueda vivir. Tenemos que hacer promociones inmobiliarias para que se generen, tanto en la ciudad cabecera como en los pueblos, barrios donde se abran calles nuevas, donde haya atendido eléctrico nuevo, donde se pueda lotear, donde donde un trabajador pueda tener su pedazo de tierra para poder construir su vivienda.»
Edgardo Beltramone resaltó que «soy abogado de cooperativas hace 30 años y esa es la herramienta, a través de las cooperativas, para generar viviendas industrializadas y además que estos trabajadores acompañan el desarrollo que todos soñamos para Villegas y podamos dar agua, luz cloacas, viviendas y gas a esta gente.»
Sobre algunas de estas cuestiones de las que se habla siempre en época de elecciones, Romina Domínguez señaló que «hay que ponerse objetivos claros, ser concretos a la hora de planificar, no soñar con grandes epopeyas, sino empezar de a poquito, dando pasitos y siendo muy honestos con el vecino.»
«Si uno es honesto con la propuesta y tiene un diagnóstico claro, que es lo que este equipo sin dudas tiene, se puede lograr. Hay cuestiones que tienen que ver con la decisión política, con el sentido común, con la practicidad y con la eficiencia», continuó.
«Tenemos que aprender que tenemos que localizar nuestra situación. Necesitamos el acompañamiento de la Nación y de la Provincia, sin dudas, pero hay problemas que impiden el desarrollo, la mejora de la calidad de vida de los vecinos y que tienen que ser resueltos por el municipio. Si después hay que ir a golpear puertas más arriba, se insistirá hasta el cansancio. Este equipo tiene esa impronta, pero sin dudas, me parece que hay que empezar a pensar en soluciones locales», apuntó la precandidata a intendente.
Acerca del tema del mantenimiento de los caminos rurales, Romina Domínguez manifestó que «te sentas con los productores y en cinco minutos, ellos tienen toda una historia de cómo es el curso del agua, dónde hay que poner más tierra, dónde hay que poner la alcantarilla, qué trabajo hay que hacer para que sea más económico.»
«Incluso, te dicen busquemos al productor dispuesto acompañar e invertir en este proyecto porque claramente le beneficia. Hay que trabajar con la comunidad, no me canso de decirlo. Gobernar con las instituciones, porque entonces tenemos la pata pública y la pata privada trabajando hacia un mismo objetivo», subrayó.
Así expresado es la definción de representación popular, pero muchas veces, quienes gobiernan olvidan que fueron elegidos para representarnos. Sobre esto, Beltramone señaló que «los políticos tenemos que dejar de ser gerentes de la mediocridad porque los encontramos en todos los ámbitos, pero en el que nos ocupa, que es el ámbito municipal, nos encontramos que el intendente de turno, trata de la mejor manera posible de gerenciar lo que tiene. Ver cómo pagamos los sueldos, cómo cumplimos con los cuatro o cinco servicios que presta la municipalidad, a veces muy ineficientemente y otras, mejor.»
«Tenemos que tener otra impronta, una visión de futuro para hacer algo distinto, porque si no, nos condenamos a tener una vida mediocre. Tenemos que tener otra visión, una épica el trabajo y del esfuerzo, que podemos mejorar, que podemos hacer cosas importantes», señaló.
El abogado contó que uno de sus abuelos era peronista y el otro, radical, «pero los dos se levantaban a las seis de la mañana, iban a trabajar todo el día. Tenían huerta en su casa para mejorar su economía familiar y el domingo se iban a poner ladrillos al club del pueblo porque no tenían nada y querían vivir en un pueblo mejor, que hubiera un club para poder reunirse con su familia.»
«Creo que ésa es la épica que tenemos que recuperar. Los dos querían que sus hijos estudiaran. Hoy, un kirchnerista tiene la visión de estar viviendo de la teta del Estado en el lugar que está o esperando para cobrar un plan social. No puede ser esa la epopeya. Tenemos que construir una épica distinta, con otros valores, con dinámica. Tenemos que propiciar otra visión del futuro», destacó.
El espacio del PRO que lleva a Romina Domínguez como precandidata a intendente y que acompaña el liderazgo de Diego Santilli, presentaron compromisos de gobierno, pero hicieron en que no quieren hacer promesas porque «hay que conocer todo el diagnóstico del distrito y ser realista con la planificación que se haga a corto, mediano y largo plazo y que eso sea un compromiso que tiene el valor de todo un equipo trabajando.»
La precandidata resaltó el espíritu y el impulso de la gente que vive en los pueblos y «creo que Villegas tiene que despertar a la inversa, desde desde la raíz, desde el interior de los pueblos hacia la ciudad cabecera, donde quizás perdemos esta capacidad del esfuerzo porque tenemos algunas cosas un poco más al alcance de la mano.»
«Así como a Edgardo (Beltramone) lo desvela el desarrollo, a mi la educación me desvela tremendamente. Que no estemos desesperados por resolver que un chico de 18 años no pueda comprender un texto básico cuando llega la facultad, que no pueda resolver una situación problemática; que no le demos herramienta, que haya adoctrinamiento, que nos vacíen los contenidos de las escuelas y estemos mirando otra película. La educación argentina fue modelo durante muchos años y en algún momento se perdió y que no estemos hoy peleandopor esto, es tremendo», subrayó la concejal.
De a poco, la campaña amanece. En las calles y a través de las pantallas, se asoman los protagonistas de las próximas Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias que tendrán lugar el 13 de agosto.
«Es momento de empezar a escuchar propuestas, empezar a escuchar estos compromisos de gobierno, de conocer a los profesionales que forman equipo y que la gente busque, que le haga ruido, que consulte», sostuvo Romina Domínguez.
Para la precandidata, «hoy no hay apertura, no hay diálogo y hay que recuperarlo. Hay que sentarse con la gente de los pueblos y hacer un presupuesto que responda a las necesidades de todos los habitantes. Hay que tratar de gobernar para todos lo más equitativamente posible.»
Ya cerca de la presentación oficial de las listas, la concejal y precandidata a intendente prometió que la semana entrante se darían a conocer los nombres finales y puestos en la lista que competirá en las PASO de agosto.
Beltramone utilizó parte de su exposición durante la presentación de los compromisos de gobierno y expresó que «los políticos deben venir para resolverle los problemas a la gente, para hacerle la vida mejor a la gente. Ésa es la función de la política de Aristóteles a esta parte: el bien común.»
Y añadió que «parece que nuestros políticos se han olvidado de esta premisa, que es el norte que debe guiar a la acción política. El famoso bien común. El bien de la gran mayoría, el bien de todos. Lo que nosotros vemos en nuestros políticos es que buscan el bien propio y la mayoría no están para servir a la gente, sino para servirse. Están para enriquecerse con la función pública. Lamentablemente se ha trastrocado toda una cadena de valores y cuando alguien llega cubre todos los cargos beneficiando a toda la familia. Eso no es lo que debe pasar, no es lo correcto. No lo podemos naturalizar, tenemos que terminar con esta impunidad.»
Finalmente, Romina Domínguez recalcó que en el equipo de trabajo «hay autenticidad, hay energía, hay honestidad, capacidad de laburo y ganas de mejorar porque cada uno de nosotros lo sufre en carne propia. Ninguno de nosotros vive de la política ni lo necesita para su vida diaria. Al contrario, está donando tiempo e ideas para que esto salga a caminar. No somos un grupo de políticos que hablamos bonito, somos gente de laburo.»