El director de Recursos Humanos de la Municipalidad de General Villegas, Martín Recalde, junto al director del Hospital municipal, Hernán Vázquez, presentaron ayer en RADIO ACTUALIDAD a la médica pediatra venezolana Ophir Margarita Barrios Lamont, que desde el mes de agosto comenzará a prestar sus servicios en el nosocomio.
«Ophir está instalada en la ciudad desde el jueves con su familia. Nos queda por gestionar la matrícula nacional, que lo hacemos el 1° de agosto; y la matrícula provincial, que es inminente sacar el turno en Pehuajó», detalló Recalde.
La pediatra venezolana comentó que junto a su familia llegó a la Argentina el 21 de octubre del año pasado, específicamente a Ciudadela, en Buenos Aires. Allí estuve hasta que aproximadamente en el mes de marzo de este año comenzamos con el contacto, vine a conocer Villegas, me gustó y el jueves nos vinimos para acá».
La médica espera «suplir la necesidad que el Hospital tiene con los médicos pediatras. La idea es completar el plantel, porque ya cuentan con excelentes profesionales. Aparte de eso, cubrir mi necesidad de continuar con lo que me encanta, que es ejercer medicina y pediatría», comentó.
Ophir tiene 32 años de edad, cuenta con 10 años como médica generalista y 6 años como pediatra. Se radicó en General Villegas junto a su esposo y sus tres hijos, Samanta (8), Gabriel (5) y Santiago (3).
Sobre nuestra ciudad en particular, expresó que le pareció «hermosa, como toda la Argentina. Es muy familiar, muy amigable y muy linda. Me encantan sus plazas».
Por su parte el director del Hospital, Hernán Vázquez, manifestó su alegría por la incorporación. «Si bien nos llevó tiempo, fuimos uno de los municipios referentes de la Provincia de Buenos Aires donde pudimos gestionar la incoporación de médicos venezolanos. De hecho abrimos el camino. Es un trámite muy riguroso, que está avalado por las universidades privadas y públicas. De acuerdo a la cantidad de médicos se distribuye para convalidar los títulos», explicó.
Vázquez destacó que «no sólo Villegas tiene la problemática con los médicos pediatras. Esto ya viene desde hace varios años en el país, así que estamos más que contentos. Obviamente les damos las gracias a nuestros integrantes del servicio de pediatría, que llevan años de trabajo en una situación muy intensa y con falta de apoyo respecto de otros profesionales».
Recalde agregó que «para mí es una satisfacción tener a Ophir en la ciudad con su familia, porque se lo que le ha costado a esta gestión llegar a traer una pediatra, algo tan demandado a nivel nacional. Para mí fue una semana muy positiva, porque viene a sumar otras cosas que se definieron, como la compra de un tomógrafo que se decía que era inviable; además del agua potable. Estoy muy contento de pertenecer a este espacio».
Por último, el director del Hospital se refirió a las críticas que se escuchan sobre el funcionamiento del nosocomio, intensificadas tal vez en esta etapa de campaña previa a las PASO del 11 de agosto.
«Yo tengo un perfil extremadamente bajo. Las críticas las tolero mientras sean constructivas, no banales que hablen por hablar. A mí la gente me encuentra en mi oficina con el guardapolvo blanco y con el estetoscopio colgado en el cuello. Soy un médico que nunca dejó la medicina asistencial», expresó.
Reconoció que «pude haber cometido errores como cualquier ser humano. Pero la gente me encuentra sea la hora que sea y siempre le doy respuesta; siempre estuve presente resolviendo problemas, para eso me pagan. No me expongo pero estoy en la trinchera, con el aval del Ejecutivo. Yo quiero y apoyo a la institución, esta gestión confió en mí y le doy las gracias. Estoy dando la mejor de mí para que funcione como lo tiene que hacer. Este es un trabajo a pulmón, a conciencia y a beneficio de la gente».