La directora de Cultura, Catriona Kirkwood, habló con FM Atualidad e hizo referencia a la decisión de cerrar los talleres de Cultura y Deportes . «Se mezclan la situación de crisis y no poder contar con los fondos que se giran en diciembre. Hay un montón de compromisos que hay que responder primero, como los sueldos. El año que viene por supuesto que va a haber talleres. Tal vez más, tal vez menos. Es una respuesta que no puede dar nadie hasta que no se cierre el presupuesto 2020 y se vea con qué se cuenta y qué se puede hacer», destacó la funcionaria.
«Los talleres culturales y deportivos se dan por finalizados el 31 de octubre de 2019», comienza diciendo el mail que desde la Secretaría de Cultura y de Deportes les enviaron -el miércoles 30, a las 13.17 horas- a las distintas Casas de la Cultura y delegaciones de los pueblos. «Motiva esta decisión la falta de fondos que sufre el municipio hoy por la situación económica que sufre el país. Sumado a ello, no se tiene la certeza de que se giren los fondos provinciales y nacionales comprometidos con anterioridad para los últimos meses de este año. Por lo tanto, nos vemos con la imposibilidad de responder con los compromisos asumidos en el mes de agosto», completa el comunicado.
La medida la tomó el Ejecutivo municipal y afectó a unos 110 talleristas, que durante el mes de noviembre se quedarán sin su fuente de ingreso. La misma causó malestar no sólo entre los talleristas, sino también en los pueblos, donde estos talleres juegan un rol vital en la vida social y comunitaria. El principal reclamo fue lo repentino de la medida adoptada.
Ante los crecientes rumores -los más imprudentes juegan incluso con el posible hecho de que no habría plata para pagar los aguinaldos de los empleados municipales-, la directora de Cultura, Catriona Kirkwood, brindó la versión oficial del polémico cierre de los talleres: «Es una decisión difícil. Tanto Sandra Heredia como yo estamos tomándonos el trabajo de llamar a cada tallerista porque es lo que corresponde. La realidad es que los fondos son escasos. No hay un compromiso de que se manden fondos provinciales en diciembre, entonces no podemos continuar con el compromiso que habíamos asumido de terminar los talleres en el mes de noviembre. A raíz de eso lo que tenemos que hacer es cerrar los talleres porque no sabemos si lo vamos a poder pagar», comentó.
La paga de los talleristas proviene de fondos educativos provinciales. No obstante, esos fondos están dentro del presupuesto de Cultura que se asigna a principio de año y por lo tanto deberían estar garantizados. Al respecto, Kirkwood dijo: «Ese presupuesto este año sufrió grandes modificaciones por la situación económica del país que todos sufrimos: hay aumentos y el presupuesto se va haciendo más chico. El presupuesto municipal es solidario, eso significa que cada área tiene su presupuesto pero si alguna requiere más presupuesto se le quita a otra. Se mezclan la situación de crisis y no poder contar con los fondos que se giran en diciembre. Hay un montón de compromisos que hay que responder primero, como los sueldos. A nivel municipal se recortan un montón de cosas, como las horas extras. En Cultura y Deportes nos toca esto».
«No es un capricho, ni una decisión que se toma con ligereza. Hay un montón de talleristas que trabajan y hay un montón de gente que viene a los talleres. Me genera una tristeza tremenda tener que hacer esto. No es lo que hubiera querido, pero me parece mejor hacer esto que no poder pagarle al tallerista en diciembre. Es la manera más honesta y frontal de hacerlo», añadió la funcionaria.
«Entiendo que para mucha gente lo cultural es algo secundario. Para mí es muy importante como sociedad porque nos genera bienestar, nos genera felicidad, nos genera una forma de expresarse y eso hace más saludable a las personas. Mientras más deporte y cultura se fomente, menos problemas de salud, estrés y agresividad social va a haber», opinó Kirkwood, visiblemente molesta por la medida adoptada desde el Ejecutivo.
Un antecedente que se repite
En el año 2015 el Frente para la Victoria abandonaba el gobierno nacional y provincial. Asumía una nueva fuerza: Cambiemos. Esa incertidumbre provocada por el cambio del color político provocó un sismo en el gobierno municipal de Horacio Pascual (del Frente Renovador, que también dejaba el poder). En esa oportunidad se optó por recortar lo que primero se suele recortar en estos casos: la cultura.
Hoy quienes se van son Macri y Vidal para que asuman Fernández y Kicillof. El gobierno local, de Juntos por el Cambio, vuelve a tomar la misma medida que hace 4 años atrás tomó su antecesor: ante la incertidumbre de no saber si los fondos llegarán, se cierran los talleres.
Este hecho tiene varias posibles lecturas. La primera es la incapacidad que tiene nuestro país de dar continuidad en el tiempo a una política o de garantizar la institucionalidad cada vez que hay un cambio de gobierno (sea del color que sea). «Cada vez que entra alguien se deshace todo y se vuelve a hacer. No podemos madurar como sociedad, no podemos tener un proyecto en común. Cambia el gobierno y entonces cambia todo, las proyecciones que uno tenía no las puede hacer. Cuando hay cambios de gestión sucede esto: hay que cerrar el año y uno no sabe cómo se va a manejar el presupuesto del año que viene. No sabemos con qué dinero vamos a contar en diciembre», explicó la directora de Cultura.
La otra posible mirada es que Cultura, Deportes y Educación suelen ser lo primero a recortar. Lo verdaderamente importante y estructural siempre termina perdiendo ante la coyuntura.
Lo que sí parece, como mínimo, imprudente es afirmar que no se pagarán los aguinaldos de los empleados municipales. «Eso es un disparate», dijo un alto funcionario municipal ante la consulta efectuada por Actualidad a raíz de los rumores circulantes. Sería apropiado, en épocas tan sensibles y de profunda grieta, no azuzar viejos fantasmas. A fin de cuentas, diciembre siempre ha sido un mes complicado para los argentinos; no conviene echarle nafta a las brasas.
