El Hogar de Cristo de General Villegas, centro barrial emplazado en La Trocha pero que atenderá la problemática de adicciones de todos los jóvenes del distrito villeguense, fue presentado oficialmente en una conferencia de prensa encabezada por el Padre José María «Pepe» Di Paola, fundador de la Fundación Familia Grande Hogar de Cristo; el intendente municipal, Eduardo Campana; el Monseñor de la Diócesis de 9 de Julio, Obispo Ariel Torrado Mosconi; el Padre Daniel Cassani de la Parroquia Nuestra Señora del Carmen y la directora de Desarrollo Social, Romina Domínguez Carvalho.
El Hogar de Cristo viene a dar una respuesta integral a los jóvenes con situaciones de vulnerabilidad social y consumo problemático de sustancias psicoactivas, siempre poniendo a la personas en primer lugar.
El intendente Eduardo Campana agradeció y les dio la bienvenida al Padre Pepe y su gente: «Se trata de que las ideas se pongan en marcha, se pongan en práctica. Hoy se nos cumple un sueño y nos va a ayudar muchísimo a nuestra comunidad y a nuestros jóvenes, por la experiencia del Padre Pepe y por el esfuerzo que han puesto para poder llevar a cabo este proyecto. Esperamos tener resultados», dijo.
El Padre Pepe destacó que «lo que ha demostrado el Hogar de Cristo en estos 12 años, es que una comunidad puede darle lugar a aquellos jóvenes que estén atravesando por el problema de la droga y hacerse cargo. Que una comunidad se haga cargo de atender, de darles una propuesta de vida a los jóvenes, es muy interesante. Está demostrado que es posible. En estos 12 años tenemos jóvenes que han retomado su pareja, se han ocupado de sus hijos, han terminado los estudios, están trabajando. Es porque la comunidad les dio esa posibilidad».
Di Paola, señalado como uno de los «curas villeros» que no dudaron en meter los pies en el barro en villas asediadas por el flagelo de la droga, destacó que la ecuación del éxito consiste en un Estado (en este caso un municipio) que se haga cargo del problema, más la Iglesia como organización eje del pueblo que asuma la responsabilidad, y el aporte de todas las otras instituciones (educativas e intermedias) que se vayan sumando. «En esta ecuación se les puede dar la primera posibilidad a los jóvenes de una recuperación», expresó.
El lema del Hogar de Cristo es abrazar la vida como viene, abrazar al hermano, sin excepciones. Por eso las puertas de este centro barrial estarán abiertas para todos los jóvenes; no solamente aquellos con adicciones a las drogas, sino también de aquellos que tengan problemas con el alcohol, estén en situaciones de vulnerabilidad social o estén solos en la vida. Serán recibidos aquellos que quieran concurrir por propia iniciativa o aquellos sugeridos por otras instituciones (Estado, clubes, escuelas, etc). El Hogar es una oportunidad para que los jóvenes puedan cambiar, para que retomen el buen camino, por eso es importante que todas las instituciones locales se acerquen al centro barrial.
«Hay un tiempo que nosotros llamamos desintoxicación y camino espiritual. Pero es muy importante el abordaje en forma completa, por eso es muy importante que el centro barrial esté vinculado al Hospital, a quien hace los documentos, a que haya oficios para aprender, a planes como FINES para terminar el secundario. Lo bueno del Hogar de Cristo es que va articulando con distintas partes del Estado que ofrecen distintas oportunidades. El Hogar de Cristo lo que hace es aprovechar todas esas oportunidades a las que el chico no accedería por sí mismo. Cuando uno aborda la situación desde distintos lados se puede reconstruir la vida personal», detalló Di Paola.
El Obispo Torrado Mosconi señaló que «en nuestros pueblos de la pampa bonaerense muchas veces hay situaciones que no tienen visibilidad. Hay veces que no somos capaces de visibilizar las situaciones de riesgo, dolor y soledad que viven tantos jóvenes. Es por eso que hace varios años les propuse a CARITAS y a los sacerdote comenzar el camino para que, al menos en cada una de las ciudades cabeceras del partido, hubiera un Hogar de Cristo. Nos llena de alegría ver el avance de estos jóvenes. Es importante visibilizar la problemática para que todos nos hagamos cargo».
El Padre Daniel Cassani celebró «pasar del dicho al hecho, a algo concreto. Muchas veces uno escucha la problemática de la gente pero ¿se hace algo? Estamos contentos porque creemos que esto es algo concreto que hacía falta. Espero el apoyo de toda la comunidad».
La directora de Desarrollo Social, Romina Domínguez Carvalho, agradeció al Ejecutivo por «acompañar y visibilizar esta problemática que en Villegas no es menor. Hemos trabajado arduamente estos últimos años. Las necesidades exceden al barrio, tiene que ver con toda la comunidad» y añadió: «La idea es tomar la vida como viene, sin juzgar, y hacer del Hogar de Cristo una familia grande».
El mensaje final de Di Paola hizo hincapié en lo importancia de que el Estado asuma el problema de las adicciones como prioritario, así como también la necesidad de superar diferencias estériles: «El tema de adicciones muchas veces queda relegado. Es muy importante darle la importancia que se merece. Tenemos que buscar la unidad más allá del partido político o la religión que se profese. El tema de las adicciones atraviesa a todos los pueblos y debe ser una política de Estado. Cuando un municipio lo asume así, está haciendo algo muy valioso. Es importante dejar de lado las separaciones, para abocarse en el trabajo de la recuperación. Veo que desde el municipio se hacen cargo del problema y lo ponen en agenda en el lugar que corresponde», concluyó.