El intendente radical de Chacabuco, Víctor Aiola, cuestionó los arcos de desinfección en los accesos: «No tiene sustento científico». El jefe comunal no ve con buenos ojos la decisión que han tomado varios distritos de la región: «Es gastar recursos para acciones que no llevan a nada”, evaluó. Varios pueblos de nuestro distrito (como Bunge y Banderaló) optaron por colocar un arco en sus ingresos.
El intendente de Chacabuco, Víctor Aiola, descartó la posibilidad de colocar arcos de desinfección en los accesos al distrito en el marco de la pandemia por coronavirus al considerar que “no tiene ningún sustento científico lo que están haciendo”. “Es gastar recursos para acciones que no llevan a nada”, evaluó el jefe comunal de Juntos por el Cambio.
Según el portal Infonoroeste, la determinación fue tomada por el alcalde tras una consulta a la médica Silvia González Ayala, titular de la cátedra de Infectología de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de La Plata.
“Las medidas propuestas de higiene con agua y lavandina, u otros productos, en las calles o accesos a las localidades no sirven como medida de prevención de la infección por el nuevo coronavirus”, aseguró por su parte la profesional de la salud.
Y agregó: “No están recomendadas, esto se debe a que el coronavirus está en la garganta y se transmite por las gotitas de saliva o manos contaminadas por haber tosido o estornudado tapándose con la mano o por haber tocado elementos contaminados con secreciones respiratorias”.
La medida ya se viene aplicando en un amplio número de localidades. Muchas veces, ante el pánico social que despierta una pandemia que ha matado a miles de personas alrededor del mundo, surgen este tipo de iniciativas que no cuentan con un aval científico pero que dan seguridad a los vecinos y los hacen sentirse más protegidos. El problema radica en que muchas veces este tipo de medidas suelen ser contraproducentes. Un claro ejemplo de esto es el uso de guantes: muchos creen que por usar guantes no pueden contaminarse y ese «exceso de confianza» hace que las personas bajen la guardia y no se focalicen en las verdaderas medidas de prevención, como lo son el constante lavado de manos, conservar el adecuado distanciamiento social, toser y estornudar en el pliego del codo o en un pañuelo descartable y evitar tocarse la cara.
