Lo hizo a través de una conferencia de prensa, hoy al mediodía. El municipio de Florentino Ameghino recibió unos inesperados 1.5 millones de pesos por parte del gobierno provincial destinados para sueldos y eso le permitió revitalizar sus alicaídas finanzas, así como dar marcha atrás con los despidos. Admitió que fue una decisión equivocada y pidió disculpas. También anunció que el comercio volverá a abrir sus puertas el próximo lunes, de 10 a 13 horas.
El despido de una docena de empleados públicos despertó una fuerte polémica en Ameghino. Sobre todo porque la noticia se hizo pública el 1° de Mayo, Día del Trabajador, lo cual tuvo un fuerte impacto simbólico. El hecho fue un reguero de pólvora y rápidamente empezó a compartirse en las redes sociales.
Lo cierto es que la Municipalidad del vecino distrito tomó ésta y otras medidas a causa de la baja de la recaudación, lo que le impide afrontar compromisos. El ajuste llega de la mano de la cuarentena dispuesta para dar pelea a la pandemia de coronavirus, que ahoga las economías de todo el país.
En el distrito que gobierna Calixto Tellechea el achique incluye también suspensión de algunos servicios y una fuerte baja de sueldos de los cargos políticos.
Hoy al mediodía el jefe comunal Tellechea dio una conferencia de prensa donde informó que la situación regresaba a foja cero y que los doce empleados volvían a formar parte de la plantilla municipal.
¿Qué sucedió para que se produzca esta marcha atrás?
La Municipalidad de Ameghino recibió 1.5 millones de pesos por parte del gobierno provincial, dinero con el que no contaban y que cayó como un salvavidas en medio del naufragio. Eso permitió revertir la situación de los despedidos y revitalizar las alicaídas finanzas municipales.
El comercio reabre sus puertas
Otro anuncio efectuado por el intendente Tellechea fue que el comercio volverá a trabajar a partir del próximo lunes 4 de mayo. Será en un horario acotado de 10 a 13 horas, pero si todo marcha bien es casi seguro que ese horario comenzaría a extenderse poco a poco.
Los comercios deberán respetar estrictos protocolos, tanto para la seguridad el personal que trabaja como para los clientes. Dejar entrar de a una persona, dar turnos espaciados (en el caso de algunas profesiones que hasta ahora estaban prohibidas), respetar el distanciamiento social, usar tapabocas, entre otras.
