La decisión ya estaba tomada y la cuarentena no fue motivo para retroceder. El proyecto continuó para adelante con todas las expectativas y las ganas de brindar lo mejor a los clientes, a los que esperan en Rivadavia 827.
«Pago Gaucho» abrió sus puertas en General Villegas para ofrecerle una nueva opción a la gente desde calle Rivadavia al 827, donde se instaló el comercio.
David Ibañez y Andrea Ruiz comenzaron con el emprendimiento con mucha expectativa, para satisfacer a los clientes en un cien por ciento; y pensando en crecer en la ciudad a la que pertenecen.
«Yo siempre trabajé en el campo y en enero, como todos los años, me fui de vacaciones a Jesús María. Tengo muchos conocidos por suerte y me dieron la idea de vender salames de Colonia Caroya y escabeches de Jesús María. Volví de vacaciones, lo hablé con mi mujer y me dijo ‘dale para adelante'», relató David en diálogo con ACTUALIDAD.
Y fue lo que hizo, darle para adelante, agregándole a la idea los quesos también de Colonia Caroya, además de salames y quesos tandilenses; y variedad en cortes de carne vacuna, de cerdo y pollo. En este último caso, David adelantó que todas las semanas, durante un día en especial, se lanzará una oferta cruzada.
Por si fuera poco, el lugar también ofrece encurtidos y dulces. «En encurtidos tenemos la vedette, que es vizcacha, pero además hay pavita, cordero, cerdos y verduras (berenjenas, ajíes y otras)», comentó por su parte Andrea.
En dulces, «hay un producto muy similar al melocotón en almíbar, tutti frutti, mermelada inglesa, naranjas en almíbar», continuó; y agregó que a su vez «contamos con licores artesanales, de naranja, limón, jengibre con nuez y vainilla, y el tradicional café».
¿Querés más? Podés probar la tabla Pago Gaucho, que no es la típica de fiambres. «Tiene tres variedades de salames, otras tres de quesos y un mix de escabechitos (a elección), además de bondiola artesanal, que también tenemos en el comercio», comentó Andrea.
La nueva propuesta comercial, que además tiene a la venta pan, facturas, tostadas, prepizzas y bebidas, funciona de 7.30 a 13 y de 16 a 20 horas, el horario que se debe cumplir en el marco de la cuarentena. El celular para comunicarse es el 15519884.
Andrea reconoció que el momento de apertura «es de mucha incertidumbre, donde uno va pasando por todos los estados anímicos, pero era una decisión que ya estaba tomada. No podíamos seguir parados. Esta es una variable a nuestras ocupaciones, para poder dedicarle más tiempo a la familia. Apostamos a la comunidad en la que vivimos y lo hacemos con buena energía», concluyó.
