El Jardín de Infantes N° 910 hizo una propuesta para festejar la fecha patria a pesar de la cuarentena y todo el pueblo se sumó.
Santa Eleodora se prepara para festejar un nuevo aniversario de la Revolución de Mayo. En esta oportunidad, y a causa de la pandemia y la cuarentena que prohíbe las aglomeraciones, la celebración deberá ser virtual. Por eso, desde el Jardín de Infantes N° 910 decidieron llevar a cabo una propuesta para incluir a toda la comunidad.
«Al ser una localidad tan chiquita los actos siempre se compartían entre la Escuela y el Jardín. Decidimos que cada casa, cada comercio, cada institución coloque algo celeste y blanco en sus puertas o ventanas y así acercarnos y festejar un nuevo aniversario de la Revolución de Mayo. Los vecinos nos pasan fotos o suben fotos al grupo de Facebook que se llama ‘Santa Eleodora, mi pueblo’. Es una manera de poder llegar a ellos, ya que no podemos estar en contacto. La gente colocó banderas y escarapelas. Desde el Jardín propusimos llevar a cabo una técnica de origami y algunos chicos hicieron corazones con un detalle en celeste y blanco. Las familias acompañan muchísimo y hemos visto propuestas muy lindas», le dijo a Actualidad Soledad Acosta, docente a cargo del establecimiento educativo.
El Jardín cuenta con una matrícula de 11 alumnos, de 2 a 5 años. Al ser un grupo tan reducido de alumnos, las docentes se mantienen en contacto a través de la virtualidad, pero siguen enviando actividades en papel. «Trabajamos con un grupo de WhatsApp compartiendo videos e información. Pero también trabajamos con el formato papel. Al ser una comunidad tan chica podemos hacerle llegar las propuestas mediante papel. También llevamos a cabo un proyecto de huerta y estamos super felices porque las familias están enganchadas y los chicos también. Están trabajando muchísimo», comentó.
Otra propuesta del Jardín fue hacer una comparación de los festejos de antes con los de ahora. «Le pedimos a la gente que comparta fotos de los actos de antes. La comunidad siempre acompaña mucho y ésta es una forma de seguir en contacto con ellos», sostuvo.
Las docentes del Jardín de Infantes N° 910, como todos los maestros y profesores en esta complicada época que nos toca vivir, están obligadas a repensar la profesión: «No estamos en el lugar físico, pero tratamos de acercarnos a ellos a través de propuestas. Sabemos que la presencia física y el vínculo no se puede reemplazar, por eso intentamos estar presentes y acompañarlos», concluyó Acosta.