22 C
General Villegas
domingo, diciembre 15, 2024
InicioSociedadEl día después: convocatoria para limpiar la Escuela Técnica

El día después: convocatoria para limpiar la Escuela Técnica

Un grupo de ex alumnos, docentes y auxiliares se convocaron para limpiar y secar la Escuela Técnica, que sufrió la voladura de gran parte de su techo durante el pasado fenómeno climático. Piden ayuda del municipio para sacar las chapas que quedaron flojas y para volver a techar la institución.

La Escuela Técnica N° 1 fue uno de los edificios que resultó más afectado por los fuertes vientos de la tormenta del sábado por la noche. Una gran parte del techo del establecimiento educativo fue volado por efecto de las violentas ráfagas y las chapas quedaron tiradas en las inmediaciones del lugar.

De inmediato la comisión de ex alumnos de la Técnica, junto a docentes y personal auxiliar, se convocaron para llevar a cabo tareas de refacción y limpieza.

César Loyarte, ex alumno de la Escuela Técnica N° 1, contó que la idea surgió para remover las chapas que quedaron tiradas y para limpiar el edificio (que terminó lleno de agua).

«Sabemos que el intendente Campana, Maricel Mangas y la secretaria del Consejo Escolar (Lorena Vuillermet) están en La Plata por el tema del techo de la Escuela. En la semana ya estarían trabajando en el lugar. En el mientras tanto va a quedar en las condiciones en las que la dejó el viento. Es un poco peligroso, esperamos que desde la Municipalidad vengan a sacar el resto de chapas que quedaron en el techo. Nosotros no contamos con los elementos para subir y hacerlo, de lo contrario lo hubiésemos hecho. Es un peligro, otro viento puede desprender las chapas que quedaron sueltas en la cima de edificio», relató Loyarte a FM Actualidad.

Afortunadamente no hubo pérdidas materiales en lo que refiere a equipo y materiales de estudio: «Se mojaron algunos libros que ya estaban para descarte. Gracias a Dios lo que es impresora 3D y material de la sala de informática y de laboratorio se conservó todo. El techo del taller resistió bien: cuando entramos no había una gota de agua», concluyó Loyarte.