Si bien el municipio tiene obligaciones respecto a los servicios que debe brindar a la comunidad, más aún cuando los contribuyentes (aunque no todos) pagan impuestos para eso; también es cierto que muchas veces dejamos que desear con nuestro comportamiento como ciudadanos.
Cada vez que llueve con intensidad y los desagües de las calles no dan abasto se genera el mismo debate: la gente no colabora, el municipio no limpia. Se trata de un poco y un poco, sin dejar de lado la previsibilidad que se debió tener en este sentido, teniendo en cuenta que los pronósticos de mal tiempo estaban rondando desde hace varios días.
Frente a esto, cabe preguntarse si no era posible chequear ciertas cuestiones antes de que diluviara en la ciudad. En algunos casos los vecinos hacen caso omiso a las recomendaciones del municipio con respecto a residuos domiciliarios, escombros o desechos de jardinería. En otros, la gente reclama porque no pasan a buscar la basura u otros por días, más allá de reiterados reclamos al Corralón Municipal. Ni siquiera cuando se cumple con embolsar el césped que se corta en los domicilios. «Hace una semana que está el pasto embolsado en la vereda y no se lo llevan», decía esta semana uno de los tantos mensajes que a diario llegan a la sección Soy Actualidad -de nuestra web – y a los teléfonos 15454315 y 15457563 de Radio Actualidad.
Entonces, reiteramos, es un poco y un poco. Y cuando todos tienen un poco de razón la situación se torna aún más complicada y termina enfrentando a la misma gente que tiene puntos de vistas distintos.
Que el área de Servicios Urbanos tiene mucho que corregir, es verdad. Que los vecinos en algunas normas de convivencia que hacen al orden y la higiene en la ciudad, también.
Ayer, por ejemplo, en los desagües de Mitre y Almirante Brown, donde como en otros sectores las calles se vieron repletas de agua, el personal municipal se acercó para hacer limpieza. Del lugar llegaron a sacar (como muestran las imágenes), mediasombra, restos de sillas de plástico y de un ventilador, etc. Podrán opinar que hizo falta semejante situación para chequear el estado de los desagües, es cierto. Ahora: ¿no puede el contribuyente buscar otra maneja de deshacerse de ese tipo de residuos?.
Otra vecina de barrio la Trocha hacía llegar a la redacción de Actualidad una imagen de la calle Batalla del Buceo, entre Tucumán y Tacuarí, donde habían «depositado» bidones, latas de pintura, colchones, chapas, cubiertas, llantas, calzado y otros, entorpeciendo cualquier posible escurrimiento del agua. «Ayer (por el jueves) los municipales limpiaron y al rato sacaron esto», decía en el mensaje que hizo llegar al medio junto con la foto. Entonces, ¿en qué quedamos?.
