El pasado domingo se produjo un incendio en el quincho de una vivienda de calle Pueyrredón al 1200. Afortunadamente los Bomberos Voluntarios pudieron sofocar las llamas y evitar que el siniestro pase a mayores. Sin embargo, fue fundamental la labor de dos bomberos que acudían al llamado de la sirena y justo pasaron por el lugar. Ellos son Marcelo Gallardo y Miguel Pasten.
El jefe del Cuartel, Carlos Ullúa, habló sobre lo ocurrido y la valiente actitud de estos dos bomberos que no dudaron en ingresar al domicilio sin tener ni el traje ni las herramientas necesarias para combatir las llamas: «Tuvimos la suerte que dos bomberos que venían hacia el cuartel pasaron por el lugar y tuvieron la valentía de sacar alrededor de 5 o 6 bidones de combustible que había en el lugar y 2 garrafas. Estos chicos tuvieron la valentía de meterse.Eso hizo más fácil la tarea del Cuerpo Activo cuando llegó al lugar. Hicieron un trabajo increíble: ingresaron a la vivienda y lograron sacar los bidones y garrafas», comentó.
La familia que alquila la vivienda es de Santa Regina. Cuando empezó el incendio los moradores estaban durmiendo. El sonido de un vidrio estallando los alertó. De esa forma constataron el incendio que cuando llegaron los Bomberos Voluntarios, ya estaba totalmente declarado.
El motivo que causó el siniestro se desconoce. En el lugar de los hechos se registraron importantes daños materiales, pero afortunadamente no hubo que lamentar víctimas.
«Había mucho material combustible: madera, papeles, ropa. Todo eso lo agravó. Enseguida tomó en llamas y levantó mucha temperatura. La loza hecha con ladrillo de telgopor empezó a chorrear el telgopor derretido. Eso dificultaba el trabajo de bomberos», detalló Ullúa.
Luego de 30 minutos de labor, el incendio fue extinguido.
