El ex futbolista de Ingeniero de Banderaló está en la 4ta división de Ferro Carril Oeste. Ya acumula un par de títulos con el club de Caballito y espera poder debutar en la 1ra. Mientras tanto, habló con OVACIÓN acerca de cómo es su vida en la pensión y lo que le piden adentro de la cancha.
Andrés Galetto quiere tomar la posta del «Ciruelo» Piaggio (con sus históricos y recordados 3 goles a Boca) y brillar en la 1ra División del Club Ferro Carril Oeste. Si bien aún no debutó (actualmente juega en la 4ta), Andrés está haciendo todo lo que tiene que hacer para que ese sueño se concrete algún día: mucho esfuerzo, sacrificio y trabajo duro.
No es fácil para los pibes del interior la vida en la Capital Federal. Tienen que dejar a su familia a cientos de kilómetros para irse a vivir a la pensión del club y acostumbrarse a una vida totalmente diferente. No obstante, Andrés ya se dio algunos gustos con el equipo de Caballito: integró el plantel de la Reserva que salió campeón del torneo de la Primera B Nacional al derrotar a Arsenal de Sarandí (fue por 4 a 2 en definición con tiros desde el punto del penal, tras empatar 1-1 al cabo de los 90 minutos) y obtuvo el tricampeonato de la 4ta división (al vencer por 3-1 a Estudiantes de Río Cuarto, con un gol suyo).
Andrés comenzó en Ingeniero de Banderaló. Debutó muy joven en la 1ra del Rojo, donde jugó hasta que apareció la chance de probarse en algunos clubes grandes. Ferro lo aceptó y le abrió las puertas. El mediocampista está en la entidad de Caballito desde el año 2016.
«Ahora estoy viviendo en la pensión del club. El primer año estaba en La Plata con un pariente, pero tenía que viajar mucho. Es la 4ta temporada que estoy en Ferro. Sé que estoy cada vez más cerca del sueño de la 1ra, pero también soy consciente que cada vez falta menos para el límite de edad para firmar contrato. No me desespero. Tengo ilusión y ganas de llegar», manifestó Galetto en diálogo con OVACIÓN.
«No me costó acostumbrarme, tuve esta suerte de acomodarme rápido. Los chicos me dieron un lugar. No me costó tanto, pero es difícil. Cuando yo vine, nacía mi hermanito. Hay muchas cosas que tenés que dejar de lado y cuando pasa el tiempo te vas dando cuenta que te perdés cosas y momentos con tu familia. Ahí empezás a valorar los momentos que pasas con tu familia», reconoció el joven futbolista.
Andrés juega de mediocampista, pero aporta llegada y gol. «El primer año en la 4ta hice menos goles. Este año empecé de otra forma, llegando más al área porque es algo que nos piden: que seamos mediocampistas con llegada y gol. Aparte de darle juego al equipo y darle salida a la defensa. Por suerte pude hacer un par de goles, agarré más confianza y me acomodé mucho mejor», explica.
En Ferro recuerdan con mucho cariño al «Ciruelo» Piaggio y Andrés también quiere dejar su marca. Sabe que falta menos para el tan ansiado debut en 1ra, pero que va a tener que esforzarse. «A seguir metiéndole con ganas que ya falta poco», reconoce.