Milagros Robledo colaboraba con Interact Club. Juan Alejandro Castaños, coordinador de esa agrupación juvenil, le contó a Actualidad cómo era Milagros y qué sintió el grupo cuando se enteró de la terrible noticia del Femicidio.
El caso de Milagros Robledo adquirió relevancia a nivel nacional. Grandes medios de comunicación se hicieron eco de este aberrante asesinato. Pero seguramente en algunos días esos mismos medios estarán ocupados con otra noticia: algún anuncio económico, un evento deportivo o incluso otro crimen que sensibilice a la sociedad.
Por eso desde Actualidad decidimos utilizar otro enfoque y recordar a Milagros no como un como un caso más de Femicidio que se suma a la triste estadística, sino como la joven comprometida que participaba en diferentes agrupaciones con fines sociales.
Una de estas organizaciones era Interact Club. Juan Alejandro Castaños, quien coordina dicho grupo de jóvenes, dialogó con FM Actualidad: «Esta nena participó en muchos eventos, nos ayudó con un carácter solidario y de servicio como hacen todos los chicos de Interact. Un día llamó queriendo ser parte del grupo, se le abrieron las puertas, concurrió a eventos y nos ayudó como cualquier chico normal. Era una chica que siempre tenía una sonrisa, bien predispuesta. Le dijimos cómo eran las pautas, cómo trabajaba el club, se adaptó y cumplió. Nunca nos trajo un problema», expresó.
«Dentro del grupo lo sentimos mucho, esto nos cayó muy mal. La vamos a recordar por su sonrisa pegadiza y su carita de nena. A mi me cayó muy mal. Yo a los chicos de Interact los quiero mucho. Es una tristeza enorme la que tenemos. Es difícil hablar porque a uno no se le ocurre cómo pudo haber pasado esto. No hay palabras para explicar esto. Esto que le sucedió a Mili nos tocó muy de cerca. El impacto es muy fuerte», añadió.
«La sociedad está muy convulsionada. El tema es que nos olvidamos enseguida porque otras cosas van pasando. Una noticia va tapando a la otra. Tiene que perdurar en el tiempo porque esto no puede ocurrir más. Tiene que quedar bien presente y servir como disparador para que se tomen las medidas que se tienen que tomar. No tenemos que mirar para el otro lado, ni desde la comunidad, ni desde los funcionarios, ni desde las instituciones. Todos tenemos que poner nuestro granito de arena. El nivel de violencia que está viviendo la sociedad hoy por hoy es muy alto», reflexionó al final.
