Esa fue la analogía que trazó el doctor Augusto Amato para describir la situación que atraviesa el país ante la emergencia sanitaria por el coronavirus y la eventual cuarentena total: «Ahora, más que nunca, tenemos que aislarnos», aconsejó el profesional médico.
Se sabe que España, Italia y otros países fallaron en la toma de consciencia y adoptaron medidas muy tarde (algunos todavía no). Argentina está tratando de adelantarse a lo que pasó en otras partes del mundo y comenzó a hacer hincapié en la importancia de la prevención para que el COVID-19 no se propague.
El Dr. Augusto Amato dialogó con FM Actualidad y subrayó la trascendental importancia de esas medidas de prevención: «Uno siempre trata que el paciente y la población tomen esas medidas, no para alarmarlos sino para que se ocupen y no banalicen el COVID-19 y la gran mortalidad que tiene», expuso el profesional.
En Argentina -todavía- no hay circulación viral. Todos los casos son de personas que vinieron de países de riesgo o algún familiar de ese paciente que volvió de dichos países.
«A eso apuntan todas las medidas del gobierno nacional, provincial y municipal: a contenerlo al COVID-19 y que no se transmita al resto de la población. Hay que contenerlo porque la cantidad de camas de terapia intensiva (respiradores) no van a ser suficientes ante un contagio masivo. Para la población que hay es una cantidad bastante aceptable. Pero el tema es cuando tenemos una pandemia como este tipo que se empiezan a ver muchos casos, como lo que le pasó a España y a Italia. Ahí es cuando se desborda el sistema de salud. Todas las medidas que se están tomando son para que esa curva no sea empinada, que no haya muchos casos en agudos que requieran una cama en terapia intensiva porque no se lo va a poder proveer. La única forma de que esa curva no sea empinada es tomando todas las medidas: y la principal es quedarse en la casa. Esa es la principal medida para que el coronavirus no se transmita en la población», afirmó Amato.
El médico recomendó a todos los adultos mayores, diabéticos, cardíacos, oncológicos y todos los pacientes de riesgo, que no salgan de sus domicilios en estos 15 días. «Es la única herramienta que tienen para no contagiarse. Tratar de que un hijo o nieto o una persona más joven vaya al supermercado, tratar de no exponerse. El virus produce fiebre alta, dolor de garganta, tos, pero en un porcentaje de la población el virus no produce fiebre, es sólo un pequeño dolor de garganta y sin saberlo lo pueden transmitir a cualquier persona», advirtió.
Y agregó: «Este virus se reproduce muy rápido y es muy patógeno. Hay que tomar todas las medidas necesarias como lavarse las manos, no tocarse con la mano los ojos y la boca, toser en el pliego del codo, mantener la distancia social correspondiente, consultar al médico si tienen fiebre o tos. Y sobre todo mantenerse aislados: no salir, no ir a la plaza, no tomar mate. Estamos como en guerra. Ahora, más que nunca, tenemos que aislarnos. Es la única herramienta que tenemos contra esto: quedarnos en casa, mirar tele, leer un libro, pero aislarnos».
Ante el brote en países vecinos (Chile y Brasil) y el advenimiento del clima frío, la situación va a empeorar en Argentina. Así lo explicó Amato: «Lamentablemente vamos a tener casos autóctonos. Es casi imposible de evitar. Lo que sí tenemos que evitar es que esa curva sea como la que fue en Italia, sino que sea una curva más aplanada que le permita al sistema de salud poder absorber a esos pacientes que requieran asistencia y que no se saturen».
Comparación con la gripe A
«El coronavirus tiene mayor mortalidad que la gripe A. Si uno toma la cantidad de muertos por la cantidad de casos confirmados es una mortalidad altísima. En algunos lugares fue del 3% y a nivel mundial se habla del 1%. Comparado con la gripe H1N1, que fue de 0.02%, es mucho más mortal», subrayó.
«Se tienen que quedar adentro y no salir ni siquiera a caminar»
Mucha gente de General Villegas se toma al coronavirus a la ligera, como si fuese algo que pasa lejos, en otra parte del mundo, o solo en la tele. Algunos todavía la consideran una gripe común y subestiman todas las medidas de recaudo. Por eso se puede ver a muchas personas que -de manera inconsciente y muy poco solidaria-, siguen saliendo a la calle a pasear, caminar, andar en bicicleta o correr. Incluso se pueden ver grupos de niños que se juntan a jugar.
Subestimar al COVID-19 y adoptar la actitud de «A mi no me va a pasar» fue el fatal error de españoles e italianos.
Amato lo sabe y por eso previene: «Veo a gente en bicicleta con sus hijos, gente corriendo, gente tomando mate. Lo siguen banalizando. Estaría bueno que estas personas hablen con italianos que en su momento hacían lo mismo y así son las consecuencias que están teniendo. Aunque parezca antipático hay que aislarse, no hay que juntarse. Esperemos. Son 15 días ahora, aunque después pueda ser un poco más. Es fundamental no juntarse porque si uno comparte una cena o un almuerzo con alguien, que no sabemos qué hizo ni dónde estuvo, nos podemos contagiar», concluyó.