Santiago Chaicolé Coronel, el «Chaico», dejó un recuerdo imborrable en el Eclipse campeón de 1978 y 1979.
Volante central de potente pegada, integró plantel junto a jugadores como Moussegne, «Lacho» Rodríguez, Damiani, Falcón, García, entre otros.
Actualmente está radicado en General Pico y jugó en la liga de Veteranos para Ferro de Pico hasta los 63 años.
El «Chaico» recuerda que, más allá de los jugadores de buen pie, lo que hizo a aquel equipo un equipazo fue su DT: Anselmo «Pocho» Rodríguez. «Venía de dirigir Pacífico Mendoza. Él nos cambió la mentalidad a todos. Era entrenador, preparador físico, de todo. Era un fenómeno cómo nos mentalizaba. Todos los partidos entrábamos ganando 1 a 0. No había mejores jugadores que nosotros. Nos había mentalizado que nadie era más que nosotros», rememora.
«Era un grupo espectacular. Muchas veces no se precisa tanto material futbolísitico. Si está todo podrido y si no hay compañerismo, eso no camina. En cambio nosotros teníamos un compañerismo tremendo, era un grupo espectacular. Era muy difícil que nos ganaran», comenta en diálogo con OVACIÓN.
Después tuvo un paso por Atlético y también por Sport de Cuenca. Cuando dejó de jugar al fútbol los amigos lo invitaban a jugar algún picado, pero no era lo mismo: «Faltaba el árbitro, la gente, el vestuario, el olor a aceite verde. Eso es impagable», reconoce.
Ahora, retirado definitivamente del fútbol, ya ni siquiera va a la cancha -«No voy más porque sufro, veo que se dedican más a golpearse que a intentar jugar»- sino que dedica sus días a la música, ya que forma parte de un grupo musical. Desafortunadamente la cuarentena lo obliga a ensayar sólo, en su casa.
De todas maneras, por más que ensaye y ensaye, es difícil que pueda interpretar tan bien la partitura como lo hacía en aquella orquesta del 78/79.