Son muchos los nombres que han quedado escritos a fuego en la rica historia de Atlético Villegas. Muchos grandes jugadores han vestido la camiseta de la Academia. Pero no son tantos los emblemas, aquellos jugadores que salieron riñón de Atlético y que pasaron casi toda su vida deportiva allí. Uno de ellos es Nicolás Pedraza, muy querido por la hinchada del León.
Pedraza fue un defensor que acumuló múltiples títulos, que integró grandes equipos y que marcó 28 goles a lo largo de su carrera en la Liga de Fútbol de General Villegas. La mayoría fueron penales, pero también hubo de tiro libre y alguno, incluso, de jugada. «Es un poco ingrato patear los penales: me acuerdo más de uno o dos que me atajaron que de los que hice», comenta.
Sus comienzos en Atlético fueron desde muy pequeño: «Mi padre tenía un gran equipo cuando éramos chicos e íbamos a todos lados con él. Se llamaba ‘La Boca’. Tenía compañeros que eran de Sportivo y que eran de Eclipse. Después, para no romper ese gran equipo, fuimos todos los chicos a Atlético. Ahí fue que empezamos todos en Atlético: el ‘Toco’ Luna, Mario Bitti, José Damiani», recuerda Pedraza.
A los 16 años fue el momento de su debut en primera. Los técnicos eran dos pesos pesados académicos: Beto Sánchez y José María De Eyto.
El campeonato que lo marcaría para siempre -aún hoy lo recuerda como el mejor equipo de todos los que integró- fue el del 75, ya que en ese año Atlético cortó una sequía de títulos. «Ese fue un gran equipo. Aparte vino un técnico que marcó cosas distintas acá en la zona, como fue Héctor ‘Pochin’ Ochoa. Fue un campeonato bárbaro y se festejó mucho. Fue un gran equipo que se dio, una buena comisión, un buen plantel y la hinchada que acompañaba siempre», rememora Pedraza.
También formó parte del equipo dirigido por «Pancho» Ferraro, a quien recuerda con mucho cariño y respeto. «Era un gran técnico, un profesional del fútbol y una gran persona. Cambió mucho la preparación física. Ese equipo volaba. Había concentraciones, comidas, cuidados. Fue un gran equipo que se formó. Me adapté muy fácil a lo de Pancho porque el fútbol es parte de mi vida», comenta.
Fuera de la Academia tuvo un paso por los Verdes de Cuenca. «En el año 85 me compró Fútbol Club de Tres Algarrobos y salimos campeones en el 85 y el 86. Después retorné a Atlético, que lo extrañaba mucho y era mi casa», dice Pedraza.
En su dilatada carrera futbolísitica, Pedraza compartió plantel y enfrentó a grandes jugadores: el «Toco» Luna y «Paco» Sesino son algunos de los nombres mencionados por el defensor. Sin embargo, Miguel Álvaro se lleva el primer lugar del podio: «Álvaro era una garantía. Vos podías subir tranquilo porque él estaba atrás», concluye.