Para la Sociedad Rural del Partido de General Villegas la medida anunciada por el ministro de Economía de la Nación -la quita de 3 puntos porcentuales de las retenciones a la soja que durante el mes de octubre serán del 30% y paulatinamente regresarán al 33% en enero de 2021- no generará la lluvia de dólares que el gobierno nacional anhela.
Bernard Courreges dialogó con Actualidad y explicó el por qué: «El productor no vende su soja porque tiene miedo de quedarse con pesos: lo agarra una devaluación y después no puede afrontar todos los gastos que vienen, que en general son en dólares. Si a vos te mejoran el 3% del precio del dólar nadie vende el dólar que tiene. Ahora, si te lo mejoran en un 30%, vendes e invertís. Por un 3% no va a cambiar de decisión el productor y eso se va a ver en las próximas semanas», señaló.
«Si tenés un billete de un dólar que vale 146 pesos y te dan 4 pesos más, un 3%, entonces vale 150. ¿Lo vendes por 4 pesos más? No. Nadie haría eso. Ahora si en vez de valer 150 pesos te dicen que vale 180, ahí sí lo vendes y con eso compras algo. Lo mismo pasa con la soja, con el agravante de que el productor tiene que salir a comprar el fertilizante y todos los insumos en dólares. Y si el dólar se disparó, fuiste», añadió Courreges.
Para el productor el gran problema estructural son las retenciones: «Cuando son muy altas muchos lotes no se pueden producir más y quedan sin sembrar. Eso es malo para Villegas porque es menos plata para la región. El problema estructural de las retenciones tan altas es ese: hay lotes que se dejan de producir. Eso nos afecta mucho porque si dejas de sembrar lotes va a haber menos trabajo: menos trabajo para los camioneros y para un montón de prestadores de servicios. Si la cosecha no es buena el camionero se preocupa porque va a transportar menos, y el que le arregla el camión también se preocupa y el que vende camiones también. Es una cadena que se va rompiendo con estas retenciones tan altas», manifestó.
Según Courreges, en los últimos 3 años se ha dejado de sembrar en un 10% de los lotes de General Villegas porque son campos con rindes que no son lo suficientemente altos y entonces los números no cierran.
«Esto es como si tuvieras un kiosco y de un día para el otro te dicen que el alfajor que vendías a 60 pesos lo tenés que vender a 40. El kiosco que está muy bien ubicado y que vende muchísimo por ahí puede seguir. Pero un kiosquito de barrio, que no vende mucho, se funde y cierra. Bueno, ese es el lote que no produce más. Llega un momento que si el campo no te rinde mucho no podés seguir, porque no podés pagar las cosas», ejemplificó.
A manera de cierre, Courreges volvió a insistir en que la medida del gobierno «no va a producir el impacto que necesita el país. Lo que hace el productor agropecuario es lo que hace cualquiera que tiene mercadería en dólares: trata de resguardarse en eso, si puede mantener el stock. No se quiere quedar con pesos porque a los dos meses sube el dólar y no puede comprar las cosas que necesita. No va a causar un gran impacto».