La agenda del Concejo Deliberante durante este 2020 ha estado atravesada por temáticas medioambientales. Fue un año legislativo de ordenanzas trascendentales para la vida de los villeguenses. A la ordenanza para regular el uso de agroquímicos -que se trató y aprobó en el mes de julio- se le sumaron otras dos aprobadas durante la 13° sesión ordinaria del pasado jueves.
Una de ellas, la que más polémica y debate había despertado en la previa, es la ordenanza que buscaba regular la actividad de engorde intensivo a corral. Ya es vox populi las quejas de los vecinos de barrio El Cruce por los malos olores emanados del establecimiento «Doña Luisa» y, a partir de ahí, comenzaron a plantearse interrogantes como ¿a qué distancia deben instalarse los feedlots con respecto a las plantas urbanas? y ¿qué sucederá con los feedlots preexistentes a la ordenanza municipal y a la ley provincial N° 14.867?
Ambos interrogantes fueron respondidos en la sesión de este jueves.
El otro proyecto medioambiental que se trató y aprobó fue la ordenanza para la Gestión Integral de Residuos Urbanos (GIRSU). Quizás este tema no cobró el vuelo del anterior, pero es sabido que el problema de la basura es de difícil solución en el municipio de General Villegas. Mediante esta ordenanza se autorizó al Departamento Ejecutivo a disponer de la venta de los materiales recuperados y/o acondicionados en la planta de clasificación de Residuos Sólidos Urbanos y a destinar esos recursos generados para programas de concientización y para bonificación de los operarios que realizan la tarea de cirujeo.
Feedlot: ¿Qué se aprobó?
Los presidentes de los bloques UCR-Juntos por el Cambio y Frente de Todos, Ignacio García y Sol Fernández respectivamente, destacaron el ejercicio democrático que implicó que todo el cuerpo legislativo haya llegado a un proyecto consensuado: debatir, limar diferencias y llegar a un resultado final que cuente con el apoyo unánime de los diferentes espacios políticos.
La ordenanza aprobada adhiere -en su primer artículo- a la ley provincial N° 14.867, que es la ley que efectivamente regula la actividad de engorde intensivo a corral aunque la misma todavía no está reglamentada.
En el resto de su articulado la ordenanza establece:
- ARTÍCULO 2º: Los establecimientos de Feedlot deberán instalarse en áreas rurales a una distancia no inferior a los 3500 metros, perpendicular desde el límite del área delimitada como centro poblado. Asimismo deberán respetar una distancia de al menos 500 metros de establecimientos educativos rurales en funcionamiento, viviendas rurales -a excepción de las propias del establecimiento-, cursos, espejos y tomas de agua de servicios públicos.
- ARTÍCULO 3°: Los establecimientos, tanto los que inicien su actividad como preexistentes, deberán presentar para su radicación y funcionamiento una solicitud de prefactibilidad y el Estudio de Impacto Ambiental del establecimiento, aprobado por el OPDS conforme al Art. 5º de la ley provincial 14867. Los establecimientos preexistentes que no tuvieran el estudio de impacto ambiental aprobado tendrán un plazo de 180 días para su cumplimiento. En caso de incumplimiento de esta obligación podrá solicitar un plazo excepcional que será determinado por la autoridad de aplicación. Cumplido este quedará automáticamente inhabilitado para operar como tal.
- ARTÍCULO 4º: Créase un Registro Municipal para fines estadísticos y de control de los establecimientos destinados al engorde intensivo de bovinos a corral dentro del Partido de General Villegas.
En definitiva, la ordenanza regula las distancias para los feedlots que se instalen a futuro; pero también contempla y legisla a los establecimientos preexistente ya que les exige la presentación de un informe de Impacto Ambiental y una solicitud de prefactibilidad.
Sol Fernández, presidente del bloque Frente de Todos, hizo alusión a eso: «Luego de muchas discusiones y mucho trabajo logramos el consenso. Llegamos a esta ordenanza que es corta y sencilla, pero práctica y aplicable. Esta ordenanza legisla a futuro y también para los preexistentes. A los preexistentes se les pide, como mínimo, que tengan el estudio de impacto ambiental por la autoridad de aplicación, que es el OPDS, y la solicitud de prefactibilidad. Además, podemos presentar los puntos o parámetros que pretendemos que evalúe el OPDS para poder solucionar los problemas preexistentes a esta ordenanza y a la sanción de la ley 14867. Desde nuestro bloque hemos tenido reuniones con vecinos y entendemos el reclamo porque es legítimo. Toda nuestra comunidad tiene el derecho de vivir en un ambiente sano, libre de olores, apto para el desarrollo humano y que las actividades productivas satisfagan las necesidades del presente sin comprometer las de las generaciones futuras. No hay derecho a trabajar ni derecho a la propiedad que valgan desde el momento en que se ejercen de manera irregular», argumentó.
GIRSU
La ordenanza de Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos fue aprobada de manera unánime. La misma prevé los siguientes artículos:
- Artículo 1°: Autorizase al Departamento Ejecutivo a disponer la venta de materiales recuperados y/o acondicionados en la Planta de Clasificación de Residuos Sólidos Urbanos.
- Artículo 2°: La fracción orgánica previamente composta será utilizada en espacios verdes públicos, coberturas de rellenos sanitarios y proyectos relacionados al compostaje de residuos orgánicos y/o huertas orgánicas desarrolladas por centros educativos y entidades sociales de la localidad.
- Artículo 3°: La fracción inorgánica que resultare recuperable será seleccionada, acopiada, prensados o acondicionados y comercializados a empresas que demuestren trazabilidad en el destino de los materiales, operatoria y mejor precio o cotización.
- Artículo 4°: Los recursos generados con las ventas del material reciclable serán asignados en un 30% a los gastos de la Secretaría de Medio Ambiente, un 10% para realizar programas de concientización y capacitaciones, y el 60% restante se distribuirá entre los operarios de la Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos que realicen la clasificación de residuos a modo de bonificación.
La ordenanza también contempla la provisión de elementos de seguridad y condiciones de higiene para quienes desarrollan la actividad.