La Ellerstina se convirtió en el primer finalista del Abierto de Tortugas tras derrotar por un ajustado 15 a 13 (llegaron 12 a 12 al último chukker) a RS Murus Sanctus, equipo en el que juegan dos conocidos de General Villegas: Alfredo Capella -que pasó alrededor de 5 meses entrenando y poniéndose a punto en La Lucila Polo Club- y el oriundo de Intendente Alvear Francisco Elizalde. El rival de la final -que se disputa este martes- será La Dolfina, que llega diezmado por las lesiones.
Ellerstina venció 15-13 a RS Murus Sanctus y está en la final del Abierto de Tortugas, primer certamen de la Triple Corona argentina, en el que defiende el título.
Igualados en 12 en el inicio del séptimo y último chukker de un partido cambiante, Ellerstina sacó ventajas en el cierre aunque tuvo un rendimiento desparejo. Por momentos se mostró impreciso, falto de taqueo y hasta desordenado. En otros pasajes, logró desplegar su acostumbrado juego de pases largos, un toque y velocidad. Cuando lo consiguió, sacó ventajas y en el cuarto chukker llegó a establecer una diferencia máxima de tres goles (8-5 y 9-6). Sin embargo, RS Murus Sanctus también mostró lo suyo, con mucha presión, destellos de Facundo Sola y Guillermo Caset y el empuje y la entrega de Francisco Elizalde. Aunque a esta nueva formación no le alcanzó, demostró, como en el debut en el que eliminó a La Natividad-Las Monjitas, tener pasta para ser protagonista en la temporada.
El pampeano Francisco Elizalde dialogó con OVACIÓN y afirmó que la mente ya está puesta en Hurlingham para llegar al Abierto de Palermo de la mejor manera.
«Arrancamos bastante bien, venimos con muchas ganas. La idea nuestra es tratar de jugar una final, tratar de ganar alguna copa, pero sabíamos que La Ellerstina es de las mejores organizaciones, de los mejores equipos. Creo que estuvimos a la altura. Tenemos que ajustar detalles para seguir mejorando. Somos un equipo nuevo, pero creo que demostramos que podemos estar a la altura y que tenemos todo como para pelearle a los más grandes», sostuvo Elizalde.
Y agregó: «Uno trata de dejar todo en la cancha y no guardarse nada. A veces se da y a veces no, pero si dejas todo en la cancha terminás tranquilo. Fue un partido muy ajustado, muy emotivo, con la adrenalina a full».
Fue un partido difícil para Elizalde porque no solo tuvo que enfrentar a un gran equipo, sino nada más y nada menos que a su cuñado, Hilario Ulloa.
«Estuvimos ligeros con las marcas. Ellos son un equipo rápido, los cuatro son talentosos y creo que los marcamos bastante bien durante todo el partido. Por ahí nos metieron algunos goles fáciles, algunos fouls innecesarios que hicimos o por ahí alguna distracción. Son cosas para corregir. Son detalles en los que hay que estar un poco más finos para que no nos vuelva a pasar. Ellerstina es un equipo de 39 goles: donde le das una luz, ellos te meten un gol fácil. No son equipos vulnerables, son organizaciones que están siempre bien muy. Donde te distrajiste un poquito después se hace difícil volver al partido. Tenemos que enfocarnos un poco más en eso», reflexionó Elizalde.
Ahora la mente ya está puesta en el próximo torneo: Hurlingham.
«Ya nos empezamos a enfocar para ajustar cosas, para seguir creciendo y para llegar lo más finos posibles a Palermo. Demostramos que somos un equipo que puede pelear a la par. Nosotros armamos un buen equipo, cada cual en su posición, estamos bien organizados. Creo que estamos bastante cerca de las organizaciones de arriba. Hay que tratar de ganarles y quedarnos con alguno de los tres torneos», finalizó el pampeano.