En su visita a ACTUALIDAD, el ex intendente y diputado nacional mandato cumplido, Gilberto Alegre, habló de política local, aunque aseguró que no volvería a presentarse en una elección para estar a cargo del Ejecutivo. «Ya estoy grande. Aparte me quedo con la idea de ese municipio que dejé yo y eso hoy no existe, está destruido. Hay que volver a reconstruirlo, las demandas van a llegar en un solo día y uno no va a poder resolverlas», dijo.
Fiel a su estilo, habló de «nosotros» cada vez que hizo referencia a su gestión municipal. Y comenzó con una seguidilla de declaraciones destacando lo hecho anteriormente; y criticando lo realizado hasta ahora desde que Juntos por el Cambio está a cargo de la Municipalidad de General Villegas. También de Horacio Pascual, quien lo acompañó como secretario de Gobierno por mucho tiempo y fue dos años intendente, cuando Alegre asumió como diputado nacional.
«Habíamos logrado un funcionamiento equilibrado entre Villegas y los pueblos, que hoy no existe; y hoy vuelven a aparecer reclamos que habían desaparecido, como la autonomía de los pueblos. Tuvimos una administración donde teníamos presente todas las demandas de las comunidades y ayudábamos a todas las instituciones, entonces estaban todos conformes. Ahora ha vuelto a renacer eso de que quieren su propio presupuesto», comenzó marcando diferencias de gestión.
Actualidad: ¿Recuerda qué porcentaje de su presupuesto estaba destinado a la masa salarial en su gestión?
Gilberto Alegre: Nosotros teníamos aproximadamente un 50% de la masa salarial; y en el ejecutado, o sea el que llegaba a fin de año, era entre el 45 y 47%. Era menos, porque siempre aumentaba la recaudación y el presupuesto se mantenía. En ese entonces teníamos aproximadamente entre 8 y 10 millones de dólares por año, en el municipio, para hacer obras.
A: Con el porcentaje actual de afectación del presupuesto para pagar sueldos, ¿usted podría haber hecho obras que en su momento hizo?
GA: No, es imposible. Además con los salarios que pagan. Acá cambian un funcionario de rubro y no se va nadie. Siguen cobrando el mismo sueldo en otra área. Hay una proliferación de sueldos que es muy difícil resolver. Dentro de unos años no les alcanza el presupuesto. Es claro que no administran como si fuera dinero de ellos. Es un jolgorio. El tema es que no hay buenos resultados en la administración. Aparte se festejan entre ellos. Ví que decían: ‘que buena la rotonda que hicieron en Chassaing y Belgrano’. Un desastre, porque no resuelve el problema que existe. Con ese criterio habría que hacer rotondas en todas las esquinas. El problema que hay ahí es la desembocadura de la calle Silvestre Martínez.
A: Días atrás habló con Actualidad Horacio Pascual, ¿lo ve como un sucesor?
GA: En una época pensé que sí, hoy me doy cuenta que no. Pascual no es mi sucesor y cuando dice ‘nuestra gestión’ habla de los dos años de él, no de mi gestión. Leí que hacía una autocrítica sobre el tema de los caminos y yo creo que no tenemos que hacer ninguna autocrítica. Nosotros habíamos elaborado un proceso virtuoso que venía avanzando, que fue la creación de las cooperativas en la zona norte del Partido; y estábamos trabajando en constituir otra similar para la zona de Santa Eleodora, que no llegó a concretarse. Pero nosotros avanzábamos en que la Municipalidad no tenía que comprar máquinas, sino que los consorcios tenían que arreglarse acondicionando y licitando máquinas, que es lo que hacía el consorcio del norte pero este gobierno se ocupó de desmantelar, porque no le pagaron más a la cooperativa que existía y forzaron la renuncia del presidente, para poner toda gente simpatizante de su espacio. Así no se puede gobernar. Pascual que haga la autocrítica de los dos años de él. Nosotros armamos el Plan Director. Un Ingeniero de Rufino, al que también echaron, iba haciendo todas las licitaciones, además de la experiencia para tratar de ver cómo se mejoraba el camino. El objetivo también era que los productores comprendieran cuál es el límite del costo de la tasa, porque sino parece que siempre hay una confrontación entre ellos y la Municipalidad. Entonces, cuando los productores participan, empiezan a comprender hasta dónde no les alcanza el dinero o hasta dónde sí. Al estar involucrados en la conservación de los caminos, tienen que poner plata, comprender y discutir.
A: O sea que la relación Alegre-Pascual está desgastada…
GA: No existe. Él mismo dijo que se bifurcaba el camino y que iba por otro lado. Me gustaría que Pascual, que está haciendo lo que hace, diga que va a ser candidato a intendente. ¿Por qué hizo todo esto? Me gustaría saber, porque no va a ser candidato a intendente. Está trabajando porque obviamente debe tener un compromiso en otro lado. Pero no por el bien de Villegas, ni por tener un espacio, ni por toda nuestra historia. Nosotros estábamos trabajando en la elección y cuatro días antes él viaja a América y se reúne con Massa. Hay fotos. Viajaron él y Jorgelina Miranda. O sea que ya estaba trabajando en contra. Obviamente no lo estaba haciendo a favor del proyecto que nosotros queríamos, que era volver al municipio. Yo pensé que Horacio era otra cosa.
A: ¿Se arrepiente, reconoce algún error en la estrategia?
GA: En la estrategia no tenía otra alternativa. Quizá podría haber jugado con Lavagna, pero no llegaba tampoco. A nivel local el peronismo lo maneja Sol Fernández y yo no tenía cabida ahí. La que dirige el sector en General Villegas, la responsable, la referente, es ella. Los demás están para aplaudir, porque no les van a dar internas ni respuestas de ninguna naturaleza. Labarta (Joaquín) dijo que hay vedetismo. Miré como firman los proyectos los concejales del Frente de Todos y da risa. Uno ‘Frente de casi Todos’ y el otro ‘Frente de los Otros’. Esto es irrisorio, no hay ningún tipo de responsabilidad. ¿A qué están jugando? Labarta tiene razón. No puede ser que haya ese debate, esa discusión, en un nivel de la conducción del Partido como es el de General Villegas, con un presupuesto de miles de millones. Entonces, si la gente ve que los que manejan ese dinero están jugando a esto, dicen ‘acá no hay seriedad’. El Concejo Deliberante no es serio, no existe.
A: Pero hay concejales suyos…
GA: No son más míos. Lo que pasa que tienen una sociabilidad que les impide mirarse feo. Les gusta estar todo el día sentados, tomando café. ¿En dónde debaten? Abajo, en la sala donde ellos ser reúnen no debaten nunca. Tienen que ir al recinto y que en el libro de actas quede asentado qué es lo que están cuestionando. Lo que pasa en el Concejo Deliberante es tristísimo, tendría que ser el foco de la oposición y de control del Ejecutivo. No están haciendo nada. Me extraña mucho del espacio de Sol Fernández, porque por ser opositora y tener parte importante en el gobierno provincial, tendría que ser la supervisora de todos los fondos que llegan al municipio y pedir una rendición de cuentas permanente. ¿Por qué no se hace? ¿Alguien sabe cuánto dinero reciben?. La transparencia de este gobierno es cero.
A: Hubo reunión para empezar a jugar en las grandes ligas, una vez más, con 50 distritos representados. ¿A nivel local, Gilberto Alegre, cómo está?
GA: Nosotros estamos muy bien, armados. No hemos aparecido todavía pero todo lo que era nuestra estructura quedó. Los únicos que quedaron afuera fueron Horacio Pascual, Jorgelina Miranda, Daniela Vicente y Laura Carelli. La mayoría sigue estando con nosotros. Están esperando, hay mucha gente joven, entusiasmada. No se qué nombre vamos a tener porque no nos van a dejar usar el de peronismo, pero vamos a tratar de tener algún partido para armar. Es lo que estamos buscando a nivel local y provincial.
A: ¿Hablándole al peronista o al vecino?
GA: Nosotros le vamos a hablar al peronista y al vecino. Lo que queremos es que la gente tenga en claro es que el kircherismo no es peronismo. Cristina tiene un partido que se llama Unidad Ciudadana; y todo lo que representa La Cámpora es Unidad Ciudadana. El peronismo hoy está llevado de las narices en función de los cargos, nadie quiere dar el debate respecto de esta situación, están todos tranquilos y contentos. Pareciera que no les importa lo que le pasa a la gente.
A: ¿Conserva votos propios?
GA: Sí. Yo. Después veremos cómo nos ordenamos. Hay una cantidad importante que tiene que ver con el espacio; y otra cantidad que tiene que ver conmigo.
