En un año complejo también en lo deportivo, donde la actividad sufrió el duro golpe de no contar con competencias, Jorge Licera y sus pupilos jamás bajaron los brazos.
La Tribu Running, la agrupación que los reúne, le puso el pecho a la pandemia y a las altas temperaturas unificando los entrenamientos en un solo horario: de lunes a jueves a las 20 horas.
Siempre hubo dos turnos, medio día y tarde-noche, pero las circunstancias forzaron los cambios. Lunes y miércoles, trabajos de fondo. Martes y jueves, el acento puesto en tareas de velocidad.
Pero más allá de lo formal, el esfuerzo compartido, compañerismo, solidaridad y un buen ambiente para pasarla bárbaro haciendo deporte.
Lunes a jueves, contra viento y marea, en lo que conocemos como «la placita del chaqueño», Licera y su Tribu tienen sus lugar, abierto a todos. ¡Felicidades!