ALCO cumplió este 25 de mayo dos años en General Villegas y en este marco ACTUALIDAD dialogó con Franca Sastourné, una de las fundadoras del grupo que, en plena pandemia y sin presencialidad, sigue sumando concurrentes, por ahora de manera virtual.
«Estamos atravesando esta situación, que por supuesto es compleja, con nuestra enfermedad, con muchas novedades y tratando de hacer lo mejor posible para cuando esto pase, porque por supuesto va a pasar y queremos que nos encuentre de la mejor manera, saludables. Estamos muy contentos por estos dos años», expresó Franca.
¿Cómo afectó a ALCO la pandemia?
A lo largo de este último tiempo nos tuvimos que adaptar para subsistir, porque las reuniones eran presenciales y esa es la clave en cualquier grupo de ayuda mutua: la presencialidad, poder vernos la cara, charlar, juntarnos. De repente nos quedamos sin eso. La Fundación nunca dejó de moverse y es nuestra contención. Ellos tienen 53 años de experiencia en el tema y por supuesto estuvieron a la altura de las circunstancias. Se reorganizaron, con la ayuda de todos, ya que nos hicieron participar para buscarle la vuelta. Es un grupo muy grande el que trabaja para contener a todos los grupos que funcionan en distintas ciudades. Nosotros siempre seguimos los lineamientos que ellos nos mandan. En este contexto, se formó un ALCO Plus, que es virtual, así que además de poder hacer las reuniones semanalmente (que seguimos haciendo todos los miércoles a la misma hora), tenemos la oportunidad de participar de reuniones con gente de cualquier lugar del mundo. En esta plataforma que crearon hay a diario por lo menos cinco reuniones virtuales. Se escuchan experiencias de personas de cualquier lugar y está buenísimo, porque lo que más sirve es escuchar qué le pasa al otro. Y además tenemos capacitaciones y charlas. Por ejemplo, el sábado que viene va a estar una psicóloga hablando sobre «Estoy o soy ansioso». Nosotros seguimos funcionando, tenemos muchas chicas nuevas que han ingresado en pandemia y han adelgazado. Se puede, con mucha ayuda.
¿Con más voluntad que nunca Franca? Teniendo en cuenta que no hay encuentro presencial con el otro…
Es que nunca alcanza con la voluntad y muchas veces baja a cero. Ni en situaciones normales, ni en pandemia, nunca alcanza con la voluntad propia. Esto está comprobado y por eso es que funcionan tan bien estos grupos de ayuda mutua, donde estamos todos en la misma situación. Sabemos muy bien lo que nos pasa, compartimos y aprendemos de otros una nueva forma de alimentarnos en todo sentido, porque no solamente es la comida, sino cómo alimentamos nuestro cuerpo de otras cosas saludables como el ejercicio, con quién compartimos nuestro tiempo, nuestros días, aprendemos a cambiar nuestros hábitos o a ver otros que no sabíamos que existían por nuestra forma de manejarnos durante tanto tiempo; viendo al otro y siguiendo los consejos que nos da la Fundación. No hay nada mágico, es hacer las cosas lo más saludable posible, moverse aunque sea encerrados, estando en casa. No alcanza con la voluntad de cada uno, por eso se necesita de grupo.
¿Las burbujas, como en la escuela, también llegaron a ALCO?
Además de las reuniones que tenemos todos los miércoles y a través de ALCO Plus, nosotros ahora tenemos burbujas. Son grupos chicos de cuatro personas, donde compartimos lo que hacemos, lo que comemos, cómo nos movemos, algunas cosas que surgen con fotos de nuestros platos y entonces vemos lo que come el otro, o cómo lo arman. Nos aconsejamos en base a lo que vamos aprendiendo. Estamos muy contenidas/os entre nosotros, porque lo necesitamos. Y los resultados han sido muy buenos. Hay gente que ha bajado mucho de peso, otros que se han incorporado ya en esta situación, personas que están en su mantenimiento ya desde hace un tiempo. La verdad que es un grupo muy lindo, muy divertido. Además nos divertimos.
¿En su mayoría siguen siendo mujeres? ¿No se animan los hombres?
En nuestro grupo de Villegas somos mujeres en su mayoría. Entraron un par de hombres pero es lo que más cuesta. Las mujeres nos cuidamos bastante más que ellos, somos más conscientes. Vamos mucho más al médico, por ejemplo. De todos modos en las reuniones que se hacen, que son por Zoom y a través de la plataforma, siempre hay hombres. Días atrás había un hombre muy mayor que hacía 36 años era parte de ALCO. Incluso se fue a vivir afuera del país un tiempo y mantenía sus charlas con el grupo, a través de cartas en aquel entonces. Bajó 90 kilos y los mantiene hace tanto tiempo. Escuchar eso es un incentivo muy grande. Quiere decir que se puede. No es fácil, pero no es imposible. Se puede.
¿Cómo pueden sumarse a ALCO?
En este momento es distinto que antes, que podían acercarse a la reunión nuestra. Ahora tienen que mandar un mail a susana@fundacionalco.org y ellos coordinan la entrevista que llaman ‘De primera vez’, cuando la gente ingresa a este tipo de grupos. Esto se hace con algunos de los coordinadores de Buenos Aires; y también pueden ingresar a la página que es alcoplus.fundacionalco.org. Ya entrando ahí pueden suscribirse. Recordemos que nosotros hacemos una colaboración, porque de eso vive la Fundación, que es de 250 pesos mensuales. Pueden suscribirse a cualquier grupo y tienen acceso a todos, pero si quieren estar en el nuestro buscan dentro de las suscripciones al grupo 3159 ALCO General Villegas. Allí pueden hacer la contribución y tienen acceso a todas las reuniones y capacitaciones que se dan. Hay por ejemplo cursos de cocina, clases de gimnasia. En nuestro grupo los encuentros son por WhatsApp, pero estamos por empezar a hacerlos vía Zoom. Nos cuesta un poco, pero nos tenemos que adaptar para seguir.
Pasaron dos años de ALCO en General Villegas. ¿Están colmadas las expectativas?
Personalmente es una satisfacción muy grande. Todos necesitamos ayuda y comprobamos que no hay mejor forma de ayudarse a uno mismo que ayudando al otro. Entonces, para mí es una satisfacción muy grande porque además me sirve mucho a mí. Y nos ponemos re contentos cuando le va bien al otro, ya que además lo compartimos y aprendemos de esa experiencia. Entonces, personalmente y para todas las chicas que organizamos las reuniones, es una felicidad muy grande. No nos tenemos que olvidar que la obesidad es una enfermedad que no tiene cura, que te va a acompañar el resto de tu vida. Para nosotras es muy importante; y para un montón de gente. Tenemos muchas alquistas, muchas nuevas y otras que quieren ingresar. Siempre decimos que acá no hay soluciones mágicas. Es muy simple, muy saludable y hay que dejarse ayudar. Recuerdo también que tenemos una página en Facebook, que es ALCO General Villegas, donde pueden escribirnos, preguntarnos alguna duda que tengan, ese es nuestro canal de comunicación. Estamos firmes y muy contentas, porque los resultados son muy buenos a pesar de todo.