Después de un año donde la pandemia pinchó la pelota y luego de muchas negativas del organismo de seguridad deportiva ni el más optimista lo imaginaba.
Pero la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide) sorprendió a todos con un gol de media cancha al pedir mediante un comunicado que «se informe a las estaciones policiales» que los municipios que se encuentren en fase 3, 4 y 5 «están autorizados a disputar encuentros futbolísticos».
Como General Villegas está en Fase 3, la posibilidad es clara y palpable. Sin medias tintas el comunicado permite que al menos se pueda jugar. Después, se verá si es con público o no y ahí también entra a tallar el municipio.
Rápidos de reflejos, entrenadores de distintos clubes que componen la Liga de Fútbol de General Villegas se auto convocaron para reunirse la semana próxima en la ciudad cabecera.
«Con la autorización del Aprevide, la baja de casos y el aumento del ritmo de vacunación se abre una posibilidad de que se pueda hacer al menos un torneo corto», respondieron los DT al llamado de Actualidad.
Dirigentes del Consejo Federal, consultados por la Liga Marplatense sobre el ingreso de público, dijeron que «en las jornadas de las divisiones Menores y Juveniles puede ir cada chico acompañado de un adulto, mientras que en la primera división las delegaciones deben estar integradas por 40 personas cada una».
Esto no intimida a los técnicos locales, que confían que al cabo de algunas jornadas se permita habilitar al menos concurrencias de entre 100 y 150 personas.
Ahora bien, deberán convencer también a los dirigentes de sus clubes, que una y otra vez repitieron que «sin público los números no cierran y es imposible jugar».
Cobra fuerza en tal sentido que Gustavo Gómez, titular del Aprevide, está trabajando para
ampliar ese cupo dependiendo del comportamiento de la pandemia en cada ciudad, para lo
cual deberá tener el consentimiento de la municipalidad de cada liga en cuestión.
Pero la tarea no termina ahí: también deberán convencer a las autoridades liguistas y municipales. Tarea complicada si las hay, como ya quedó demostrado en 2020 cuando con un panorama mejor, leasé menos contagios y menos muertos, siempre se mostraron remisas a autorizar la vuelta del fútbol.
«Sí, lo sabemos. Con el Aprevide no alcanza. Pero es un punto de partida. Después iremos por el visto bueno de dirigentes, autoridades de la Liga y el municipio», tienen en claro los entrenadores.
La idea reinante es empezar a entrenar a fines de julio o directamente en agosto para ver si en septiembre se puede dar comienzo a algún torneo corto, que no vaya más allá de los primeros días de diciembre.
¿Qué piden? Que la Liga confirme la realización del torneo y le ponga fecha. «Lo necesitamos para que los chicos se motiven. Si no hay fecha de inicio no vamos a conseguir que nadie entrene», se sinceraron.
Después de un receso forzado que ya lleva 18 meses, el fútbol local amaga volver. Las ganas de jugadores y DT’s está. Se supone que las de dirigentes y autoridades también. Más allá de eso los números de casos activos y los decesos deberán seguir su caída. Y avanzar la vacunación. Y aceptar jugar, al menos por ahora, sin público. ¿Difícil? Sí. ¿Imposible? No.