Ya habiendo presentado la renuncia oficialmente y en su primer día como ex directora de Cultura de la Municipalidad de General Villegas, Catriona Kirkwood dialogó con FM Actualidad y explicó un poco más en detalle el por qué de su decisión.
«Soy muy reservada con mis acciones. Hasta que no tomo una decisión o hasta que no estoy segura de lo que voy a hacer no lo comunico. Mi renuncia la presenté en el municipio y considero que esa es la forma en la que uno debe manejarse. La renuncia debe ser primero ante el municipio y después si los medios quieren levantar la noticia que lo hagan», manifestó.
De acuerdo a las palabras de la ex funcionaria, su alejamiento no tomó por sorpresa al intendente Campana. «Hace un mes se lo comuniqué personalmente para darle aviso, para que vaya pensando en un reemplazante, para darle mis razones personales también. Este tiempo estábamos tratando de presentar la página que se demoraba porque no podíamos reunirnos y estaba esperando poder cerrar eso para irme de la manera más prolija posible. Con Eduardo la conversación fue en buenos modos, entendió mis razones. Y con mi equipo también. Uno no está feliz de irse. La gente con la cual trabajo tampoco estaba contenta de que me iba porque armamos un equipo muy lindo y pudimos trabajar en armonía estos dos años y medio. Pero a veces uno tiene que tomar decisiones y a veces esas decisiones no son fáciles de tomar. Fueron muchas cosas en la balanza hasta que un día la balanza se inclinó hacia mi vida privada. Por eso tomé la decisión», detalló.
«Eduardo me dijo que le parecía una lástima y que si estaba segura. Lo que pasa es que yo no fui con una consulta, fui con una decisión tomada. Le dije que estaba tratando de dejar todos los papeles en orden, pero que mi decisión era ésta», agregó.
El balance de su experiencia
«Fue la primera vez que cumplí un cargo político. Me dejó un montón de experiencia, de conocimiento. No sé si es el mundo que más me gusta y si lo repetiría, pero creo que se pudieron hacer muchísimas cosas lindas. Creo que el 2019 fue un año lindísimo, un año donde pudimos trabajar con mucha libertad, un año donde pudimos armar experiencias como Jóvenes Promesas. El 2020 fue una bomba. Teníamos un montón de proyectos, íbamos a crecer un montón y la pandemia nos cambió todo. No fue un año fácil el 2020 y tampoco el 2021, que fue peor. Es una realidad que nos toca y no hay mucho que podamos hacer. Esta realidad me afectó personal y familiarmente. Tuve que tomar una decisión entre la necesidad de estar en mi casa y darle más contención a los chicos y a su educación o Cultura», relató.
«Las medias tintas no me gustan. Lo que hago lo hago al 100%: o estoy o no estoy», culminó.