Actualidad dialogó con Patricia Reid, directora de la institución que trabaja en el desarrollo de los niños durante la infancia temprana.
El Centro de Atención Temprana del Desarrollo Infantil N° 571, popularmente conocido como CeAT, cumplió 31 años de vida y es otra institución que no pudo celebrar como corresponde debido al marco de pandemia en el que estamos inmersos.
«Como todas las instituciones educativas tuvimos que acomodarnos a estos tiempos excepcionales. Trabajamos desde la virtualidad, con la particularidad que nosotros trabajamos codo a codo con la familia, acompañando en estos procesos de desarrollo y crianza y crecimiento de la primera infancia», manifestó Patricia Reid, directora del CEAT desde el año 2015 y también docente.
El CeAT atiende a una población que va desde los 45 días de vida hasta los 3 años, etapa fundamental en el desarrollo de los niños. Concurren alumnos de la ciudad cabecera y de todos los pueblos del distrito.
Se suele atender a niños que son derivados por pediatras y que presentan alguna patología o riesgos temporarios en su desarrollo. Sin embargo, también se atienden a las familias que no llegan a través de una derivación médica y que se acercan de forma espontánea a la institución, buscando acompañamiento en la crianza y desarrollo de sus hijos. «Ante estas situaciones siempre buscamos distintas formas de trabajo para poder acompañar a la familia, organizando grupos multifamiliares, de acuerdo a franjas etarias, trabajando en las orientaciones, en hábitos, en rutinas de la vida diaria. Atendemos a madres primerizas y a niños prematuros. Tenemos una población bastante nutrida y de distintas características», aseguró Reid.
El eje vertebrador del CeAT es el juego. A través del juego y los juguetes -que siempre son una necesidad para la institución- se realiza una mirada integral de la funcionalidad del niño.
Balance de estos 31 años
«Es importante y relevante tener una institución de este tipo, fundamentalmente porque son importantes y fundantes estos primeros aprendizajes en la niñez. En el CeAT tenemos la particularidad de hacer una enseñanza individualizada y de hacer partícipe a la familia porque trabajamos con los padres y con los niños. Si tenemos que hacer un balance es muy favorable y positiva la repercusión e importancia que tiene nuestra institución a nivel comunitario», concluyó la directora del CeAT.