La convocatoria a inscribirse la realizó el municipio días atrás, recordando la vigencia de una ordenanza aprobada por el Concejo Deliberante.
La Municipalidad de General Villegas convocó días atrás a los emprendedores locales a inscribirse en un Registro de Cocinas Domiciliarias, luego de que la iniciativa fuera aprobada en el Concejo Deliberante local.
La Ordenanza N° 6187 se encuentra en vigencia, con el espíritu de formalizar y formar a aquellas personas que elaboran alimentos en su cocina de uso particular.
En diálogo con ACTUALIDAD, el secretario de Promoción, Medio Ambiente y Comercio, Federico Gonella, había dicho que «con la pandemia mucha gente empezó a cocinar como un rebusque a la crisis que estamos viviendo; y el Concejo votó una ordenanza para regular el tema para evitar falencias, sobre todo en seguridad e higiene».
«La idea es acompañarlos para que puedan seguir haciendo sus alimentos, pero de una forma segura y sin riesgo para la salud pública. La intención no es multar a nadie, sino acompañar y educar», había agregado el funcionario municipal.
Por entonces se informaba además que quienes estén interesados en inscribirse podrán hacerlo durante todo el año (no hay plazos) completando un formulario digital. Y también podrán llamar al teléfono 423613, o dirigirse a la oficina de Bromatología ubicada en calle Fasciolo (entre Lavalle y Matheu).
¿Qué pretenden con esta medida?
En los últimos días, la Red de Emprendedores local expresó a través de las redes sociales, e hizo llegar a los medios de comunicación, «nuestro total repudio a la Ordenanza Municipal N° 6187 que contempla el Registro de Cocinas Domiciliarias con un control por demás excesivo sobre los diferentes emprendimientos en una situación económica más que difícil para toda la población».
En el escrito agrega, textualmente:
«Estamos de acuerdo hasta el punto de tener acceso a una capacitación para la manipulación de alimentos, sería super necesario y conveniente pero, ¿pedir títulos de propiedad o contratos de habitación, realizar un croquis de la cocina, que nos investiguen inspectores presencialmente y demás formalidades absurdas que no hacen más que hostigar y generar trabas a una actividad emprendedora que tiene márgenes de ganancias muy pequeños y con los que apenas se puede vivir? Vamos…
En lugar de proponer ayudas o créditos accesibles, se sigue hostigando a un sector en el que la mayoría sólo llega a cubrir las cuentas del mes, realizar las compras de materias primas y, con mucha suerte, reinvertir en implementos para la actividad.
Llamamos a toda la población a reflexionar sobre estas decisiones tomadas desde un sillón calentito y alentamos a todos los emprendimientos a seguir normalmente con sus actividades en este contexto tan difícil, que claramente no está siendo bien analizado por las autoridades.
¿Desde qué zona de confort se dictan estas medidas? ¿Indagan, preguntan o recorren las calles para saber lo que está pasando? ¿O viven en un mundo de fantasías?
¿Y dónde termina esto? ¿En un tarifazo a los emprendimientos villeguenses?».