José Arbas alertó este martes en ACTUALIDAD sobre el intento de estafa que sufrieron en el comercio que la familia tiene en el acceso Carrozzi y Parra de nuestra ciudad.
«Llamaron por teléfono al negocio y pidieron una cotización por varias chapas para techar un galpón. Una vez dado el presupuesto, nos solicitaron los datos para hacer la transferencia de dinero. Y yo, a su vez, les pedí que me enviaran por WhatsApp mayores precisiones respecto a los datos de la empresa, para no cometer errores», comentó José, de Arbas Hermanos.
El valor de la supuesta compra era de $700.000, «pero al entrar a Home Banking no aparecía ninguna transferencia. Resulta que no había sido hecha de una manera normal, cotidiana, sino por Debin; y un tanto apurados nos daban una serie de indicaciones con pasos a seguir para finalmente aceptar la operación», continuó el joven comerciante.
La entidad a través de la que se hacía la transacción era Banco Galicia, «que nos viene advirtiendo a los clientes sobre distintas estafas. Y en este caso, al ingresar a la página web, nos advertía por una extracción de dinero. Es decir, que nosotros no íbamos a recibir esos 700 mil pesos, sino que los íbamos a transferir a una cuenta. Era una solicitud de débito. Yo le iba a transferir el dinero a esa persona», explicó José.
«A quien nos llamó no le importaban las chapas ni nada. El apuro era para que acepte la solicitud y de esa manera ellos recibieran el dinero», añadió; al tiempo que manifestó que como comercio «estamos acostumbrados a compras por importes elevados, entonces no nos llamó la atención. Pero sí me resultó rara la foto de perfil del WhatsApp desde el que se estaban contactando».
Al advertir que estaban intentando estafarlos, «le hablé de denuncia y desapareció», dijo, con la intención de que su experiencia sirva de advertencia «a los demás comerciantes, porque a veces por tener una venta y por apurados, uno termina estafado. Tienen mucha habilidad para estas cosas», expresó.
José opinó que «en Villegas hay alguien que aporta datos para que esto se lleve a cabo»; e informó que si bien el número de teléfono que se contactó con el comercio tenía característica de Capital Federal (011), «la tonada de quien nos hablaba era cordobesa».
Pero además, destacó que en este caso «usaron el nombre de una empresa que es conocida, que existe en Punta Alta, aunque resultó extraño que en el perfil de WhatsApp no tuviera el logo de la firma, que es lo que habitualmente ocurre».
«Hay que estar alertas y ser muy cuidadosos, porque están todo el día buscando a quién estafar. Y uno, en el afán de vender, hace un clic y termina estafado», concluyó.