Gladys Pinedo de Yalet le pide respuestas urgentes a las autoridades municipales. «Pedimos que corten la calle para darle salida al agua con mayor rapidez y que nos hagan la entrada que sacaron. ¿Cómo puede haber tanta desidia de cerrar los ojos ante estos problemas?», fustigó la productora.
El agua causó y sigue causando estragos entre los productores de General Villegas. Quienes más la sufren son los pequeños productores, tal es el caso de Gladys Pinedo de Yalet, cuyo campo está ubicado en Los Laureles, una zona que ya se naturalizó en el imaginario popular como una laguna pero que no siempre lo fue (de hecho tuvo que intervenir la mano del hombre para que el agua fluya hacia allí). Además del encharcamiento Gladys tiene otro problema: el municipio quitó unos tanques -que ante la falta de respuesta de las autoridades locales habían sido adquiridos y colocados por los propios dueños- y se quedaron sin entrada al campo.
«Tenemos algunas hectáreas frente a la laguna. Ahí corre un gran canal que le decimos el ‘canal madre’ porque es el que viene del Parque Municipal. Tiene algún canal aledaño que es el que han hecho por el cementerio y deriva al canal madre. El canal madre corre por un camino vecinal, al costado de La Trocha vieja. A ese camino deriva otro canal que son las aguas que vienen de lo de Tirone. Pero lo que viene del cementerio son las cloacas, o sea que no es un desagüe pluvial sino que es desagüe cloacal. La cloaca va pura. Como la planta depuradora no funcionó nunca entonces corre todo por allá. No estaba entrando el agua al campo nuestro porque continuaba su cauce por el canal, pero desbordó porque no ha sido limpiado en años», explicó Gladys.
«El año pasado conseguimos unos tubos y habíamos acordado con Cepa (ex secretario de Planificación y Desarrollo Territorial) para poner la pasada ahí, porque es un canal muy profundo y ancho y no se puede pasar. Con la inundación del 2016 nos sacaron la pasada a nosotros porque no dejaba escurrir el agua y también la que tenía Marcelo Formica más adelante, entonces nos quedamos sin entrada a los campos. Conseguimos los tubos de 3.50 de diámetro, que la Municipalidad no los tenía, para hacer una buena pasada y un buen trabajo. Estuvimos esperando que vayan los de la Municipalidad a hacerlo, pero no aparecieron. Entonces lo hicimos nosotros con nuestros recursos económicos. No tuvimos respuesta, lo hicimos porque teníamos que darle una solución al que arrienda al campo para poder entrar. Pero antes de la llegada del ministro (Javier Rodríguez) fueron y sacaron los tubos que hacían contención. Los rompieron, los abollaron y los dejaron tirados. No nos avisaron», añadió la propietaria del campo.
«Cepa había dicho que consiguiéramos los tubos y que ellos los iban a colocar. Pero pasó un año y no los pusieron. No teníamos entradas para las máquinas y lo hicimos nosotros. Era un trabajo bien hecho. Además el agua, ahora que sacaron los tubos, corre con el mismo nivel que corría antes, entonces no era necesario sacar esos tubos. Si entorpecía podrían haber hecho un by pass. Ahora nos quedamos sin entrada. En un mes, mes y medio, a la cosecha hay que sacarla. ¿La vamos a sacar volando, en helicóptero? ¿Qué respuesta nos van a dar?», se lamentó.
La propuesta
Junto a otro productor de la zona (Marcelo Formica) fueron a hablar a la Municipalidad para proponerles una alternativa. No tuvieron respuesta.
«Queríamos decirles qué era lo que estaba haciendo contención, que es donde ellos pusieron alcantarillas de 60 centímetros que cortan la calle. Ahí remolinea el agua y no pasa. Nosotros le sugeríamos que corten y que dejen un puente. Eso va a aliviar toda la salida. No nos atendieron, ni siquiera telefónicamente. Estamos esperando que nos llamen. No han atendido nunca a los pedidos y posibles soluciones de los productores», enfatizó Gladys.
Y agregó: «Nosotros proponíamos hacer un gran canal dentro de los campos, encausándolo con la entrada de agua de la 226 y después unirlo a la parte expropiada y darle salida al canal madre del camino vecinal. Fue presentada la idea el 16 de febrero de 2016 sin respuesta hasta la fecha».
Laguna que no era laguna: la mano del hombre
«Pedimos obras estructurales porque esos campos siempre fueron productivos y no eran zona de baja. Ese agua no correspondía que vaya a Los Laureles, correspondía que vaya a otro lugar. Para poder pasar el agua a Los Laureles tuvieron que romper unas lomas por lo de Trojaola, porque sino el agua no pasaba. Si no rompían esas lomas el agua iba para Elordi. Esas eran las lagunas naturales de siempre. Eso se inundaba. Esas lomas las cortaron en la gestión del intendente Ledesma, en el año 77/78. Fue de forma arbitraria. Nosotros teníamos tambo, se sembraba trigo, se hacía sorgo. Nos quieren hacer creer que fue una cosa natural y no fue natural, fue arbitraria», recordó.
Reclamo final
A modo de cierre Gladys manifestó que tuvieron que sacar hacienda, perdieron pasturas y el girasol de su inquilino peligra porque se acerca la cosecha y no se puede ingresar al campo.
«Pedimos que corten la calle para darle salida al agua con mayor rapidez y que nos hagan la entrada que sacaron. ¿Cómo puede haber tanta desidia de cerrar los ojos ante estos problemas? Estamos recibiendo el agua de General Villegas, del distrito y las cloacas de regalo. Están contaminando absolutamente todo», concluyó.
Lo que más enoja a los productores afectados es que el municipio sigue cobrando las tasas a campos que son improductivos y están inundados. Piden que desde la Municipalidad se exceptúe de pagar impuestos a aquellos productores que no pueden explotar sus tierras.