Entre las personas que esperaban para ingresar para disfrutar de la intervención artística Mundo Puig, en el marco del Festival Querido Manuel, nos encontramos con Esteban Parola.
El actor, nacido en Santa Eleodora, es también vicepresidente de la Casa del Teatro y según anunció presentará en el mes de noviembre la obra
Entre saludos y abrazos, Esteban manifestó que «es la primera vez que puedo venir al Puig, porque siempre por una cosa u otra no pude.»
El fin de semana largo fue el marco perfecto para el reencuentro con la familia y vivir el festival Querido Manuel.
Esteban llegó al predio del Centro Cultural Molino Fénix a las tres de la tarde, para no quedarse sin entrada para ver la obra de Garbuio y Courreges y contó que está «trabajando de lo que me gusta, así que no me puedo quejar.»
«Estoy con tres espectáculos diferentes. Uno para escuelas que se llama «San Martín el padre», con «Carmela» que es una obra que me viene dando de comer hace mucho tiempo y el unipersonal que hago con mi payaso», señaló.
Además, el actor nacido en Santa Eleodora y formado en la Escuela Nacional de Arte Dramático, es vicepresidente de la Casa del Teatro, con lo que «me compré una bolsa de problemas y me lleva mucho tiempo», aunque se manifestó «contento, porque hago lo que me gusta.»
Además, anunció que en el mes de noviembre vendrá a General Villegas, por medio de la Biblioteca Municipal, con un homenaje al circo criollo, que es «un espectáculo que hacemos con una compañera, que es para toda la familia. En la primera parte hay una rutina de circo y termina con un sainete muy cortito, en verso, para homenajear a los circos.»
Sobre esta relación con el circo, Esteban destacó que «soy actor por haber visto a Mario Patagonia y su circo criollo en Santa Eleodora, cuando iban a hacer funciones. Eso fue lo que generó mi curiosidad por el teatro.»
Asimismo, indicó que «con la agrupación que conformé, que se llama Payasos sin carpa, la idea es llevar el circo adonde las carpas no llegan» porque es como «dar circularidad, yo conocí al teatro a través del circo y, a lo mejor, un pibe conoce el teatro a través de lo que hacemos.»
Sobre aquel Circo Patagonia, tan inolvidable para los villeguenses de varias generaciones, Esteban Parola señaló que «cuando yo les digo a mis compañeros que vi Hormiga Negra y Juan Moreyra, me dicen que no puede ser. Pero fue así, porque a mi pueblo llegaba un circo criollo en el que se veían esas obras.»
Tuvimos que dejar de hablar para sumarnos a la cola que nos llevaría en los próximos minutos a adentrarnos a la magia de una de las mejores obras artísticas que he visto en los últimos años. Éramos dos ansiosos por descubrir lo que iba a pasar.
