El Museo Histórico Regional se prepara para una nueva edición de su tradicional concurso de barriletes, evento que se celebra anualmente y que este año promete ser más especial que nunca.
Miguel Alegrí, uno de los organizadores, destacó en Actualidad que «el jueves fue un día perfecto para remontar barriletes. Fue un día maravilloso para disfrutar al aire libre, con un viento ideal para la actividad», comentó.
El concurso de barriletes y los talleres para aprender a confeccionarlos son actividades destacadas del Museo Histórico Regional. «El barrilete estrella del Museo, hecho en 2015, es remontado cada año con algo nuevo», explicó Alegrí, subrayando la importancia de mantener viva esta tradición.
Los talleres, dictados por Alegrí y otros expertos como Mario Pereyra, buscan enseñar a niños y familias a fabricar sus propios barriletes. «Nosotros fabricamos y enseñamos a hacerlos, continuando con las antiguas tradiciones de los juegos de los niños», afirmó.
La propuesta no solo atrae a los residentes locales, sino que también recibe visitas de comunidades vecinas. «El año pasado, en Santa Regina, la comunidad escolar y sus familias se unieron para fabricar una gran cantidad de barriletes», recordó, emocionado por la respuesta positiva y la participación comunitaria.
Además, el Museo Histórico Regional ha recibido el apoyo del municipio, que ha entregado los materiales necesarios para la confección de los barriletes. «Estamos muy contentos y posiblemente se repita la iniciativa de trasladarnos a otras localidades para hacer talleres», mencionó Alegrí.
Destacó a su vez la importancia emocional de remontar un barrilete, actividad que aprendió de su padre. «Cuando uno remonta un barrilete y se detiene en el cielo, hay una gran comunicación, se emanan sentimientos maravillosos», dijo.
El objetivo del Museo es mantener viva esta tradición y fomentar la participación familiar. «Es una comunión que se realiza entre padres, hijos, familiares y todo el entorno social», afirmó Alegrí.
La esperanza es que en este 2024 la participación en los talleres y el concurso desborde las expectativas. «Esperamos que vengan y que no tengamos espacio, que tengamos que salir a hacerlo en las vías poniendo tablones», comentó entusiasmado.
Alegrí recordó algunos de los barriletes más impresionantes que ha visto a lo largo de los años, destacando las bombas y las estrellas, por su estética y capacidad de vuelo. «Los más hermosos son las estrellas, con su colorido y grandes flecos. Son muy atractivos», mencionó.
Finalmente, extendió la invitación a todos los niños y familias a participar de los talleres y el concurso, en ambos casos en fecha a confirmar. «Nadie se va a quedar sin barrilete. Tenemos preparados cañas, hilos y papeles. Será una gran fiesta», concluyó.