Fuentes consultadas en INTA General Villegas manifestaron que, si bien no se comunicó oficialmente, la baja del Programa Pro Huerta ya es un hecho. Inclusive, se entregaron algunas semillas de otoño-invierno pero ya no se están entregando las correspondientes a la próxima estación.
Aparentemente, Pro Huerta dejó de funcionar porque desde el Ministerio de Capital Humano no se habría firmado su continuidad.
El Programa funcionaba en conjunto con el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el Ministerio de Desarrollo Social, una iniciativa agroecológica «con el fin de promover la Seguridad y Soberanía Alimentaria, a través del apoyo a la producción agroecológica y el acceso a productos saludables para una alimentación adecuada», indica su página oficial.
El Pro Huerta trabajaba con 630 mil huertas y 130 mil granjas, constituyendo un aporte alimentario y nutricional para más de 3,5 millones de personas. Alimento sano, accesible y bajo circuitos cortos de comercialización, favoreciendo al productor y al consumidor.
Además, tenía proyectos especiales para el acceso al agua huertas, un programa educativo ambiental que llegaba a más de 2 millones y medio de personas en el país y que fue reconocido en todo el mundo.
