El ambicioso proyecto de la institución promotora de la salud e inclusión va tomando forma en la recta final del año.
El proyecto marcará un antes y un después en la historia de Aderid, que ya tiene más de 25 años. Todo comenzó en este 2024 con un encuentro entre el intendente Gilberto Alegre y representantes de la institución.
La iniciativa surgió como respuesta a la creciente demanda de atención para personas con discapacidad, que enfrentan limitaciones en el acceso a espacios dentro del sistema educativo convencional.
La necesidad se volvió más evidente en los últimos tiempos, especialmente para aquellos niños que aún no alcanzan la edad requerida para asistir al Centro de Día. Durante aquella reunión, Alegre propuso la cesión de un terreno ubicado frente a la actual institución, cerca del Hospital municipal. El Concejo Deliberante respaldó la propuesta y aprobó una ordenanza en este sentido.
Una necesidad que no podía esperar
Después de tanta lucha y esfuerzo, la institución podrá llevar a cabo las obras. La razón principal que dio pie a la necesidad es la alta demanda que vienen teniendo, lo cual hace inútil que solo el Centro de Día y Rehabilitación pueda albergar a todos los pacientes.
La directora de Aderid, Analía Campana, dio detalles al respecto: «Hay algunos concurrentes o personas con discapacidad que necesitan más atención de la que tenemos actualmente. Ya conversamos con IOMA, que nos viene aprobando algunos tratamientos. Estos chicos deben estar en un Centro Educativo Terapéutico. Por esta urgencia, nació la idea».
Por el aumento en la cantidad de personas con autismo u otras patologías, resulta prioritario que la ciudad cuente con un centro de estas características. «Nos permitirá ampliar la cantidad de horas y trabajar en espacios grupales para que los niños puedan ir a una escuela. Y que a partir de ahí, puedan sostenerse», agregó Campana.
En este sentido aclaró que, en caso de hacer terapias grupales, la carga horaria debe ser mayor. Por ello, el nuevo Centro permitirá compensar algunas horas escolares que proporcionen un buen desarrollo, aprendizaje y sostenimiento de los alumnos. «Suele pasar que los niños caducan sus conocimientos en las escuelas. Eso no está bueno», sostuvo la directora.
Un avance prometedor
Desde que se firmó en agosto el convenio con el municipio en agosto para cederle a Aderid un terreno en comodato por 20 años, la institución está trabajando en el futuro Centro.
Mientras se aguarda la apertura de una calle que sirva como una entrada de emergencia a la ambulancia o autos particulares, se comenzará a cerrar el lugar.
«Tenemos el proyecto y el diseño. Es una obra preciosa. Se nos caen las lágrimas. Será hermoso y moderno. Los chicos necesitan un lugar así», comentó Campana, quien lleva casi quince años a cargo de la dirección de Aderid.
En este marco, también se piensa en un gimnasio destinado a los adultos mayores, ya que tras firmar un convenio con PAMI, la demanda en este sentido aumentó de forma considerable. «Tendremos un gimnasio, que contará con una pileta climatizada. Y además vamos a retomar equinoterapia. También tendremos, a futuro, una pileta al aire libre para el verano».
Con más de 25 años con funcionamiento en General Villegas, Campana remarcó el progreso de la institución, que comenzó con cuatro pacientes y actualmente tiene más de 120. «El espacio nos quedó chico. La urgencia es la creación del Centro Educativo Terapéutico. Vamos a necesitar el apoyo de la gente», adelantó.
Una gran inversión económica
Todo gran proyecto requiere de una gran inversión. Por este motivo, desde la institución invitan a realizar donaciones, ya sea de empresas o personas individuales. «Pedimos la colaboración de todos. Cualquier granito de arena será suficiente y necesario para poder hacerlo», sostuvo la directora de Aderid.
Al mismo tiempo, mantienen conversaciones con el gobierno provincial por subsidios. «Pero pediremos apoyo social. Necesitamos de todo General Villegas. Es un proyecto para toda la ciudad, no solo para la institución. Significa mucho más trabajo en un lugar precioso y confiamos en que la gente se involucrará, porque siempre nos apoyaron», expresó.
Llegada a la comunidad
Para progresar en el camino de los aportes, anticipó que lanzarán la venta de un bono contribución que tendrá como premios las camisetas de Boca y de River, firmada por los jugadores de ambos equipos.
El precio será de tres mil pesos y tendrá diferentes colores de acuerdo a la camiseta en la que esté interesado el comprador. «Queremos es que esto se expanda y que sea una forma mínima de colaborar. También tenemos la intención de acercarnos a las empresas. Sabemos que es un proyecto ambicioso, pero nos irá bien», aseguró.
¿Cuándo comenzaría a funcionar?
Sin una fecha concreta, Campana expresó: «Me gustaría que sea más rápido. Pero hay que ir paso a paso. Las construcciones siempre son lentas. Será un proceso que llevará tiempo. Pero con confianza y expectativa».
Además del comienzo de las obras, Aderid deberá gestionar la parte burocrática, que incluye la habilitación del lugar desde el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires y el convenio a firmar con IOMA. «Estamos a un paso. Tener el proyecto es algo muy emocionante de por sí. Uno le puede decir quienes estarán y cómo se integrará a los chicos», manifestó la directora.
La relevancia para la ciudad
El nuevo Centro abrirá la fuente laboral. «Vamos a necesitar mayor cantidad de profesionales. Sabemos que habrá un movimiento interno en la institución de personas que están en el lugar. Será el único Centro de esta talla a la redonda. General Villegas lo debe tener. Es del y para el pueblo», declaró Campana.
Al mismo tiempo, aumentará la cantidad de pacientes dentro de Aderid, ya que permitirá un trabajo de forma grupal. «Por eso, tenemos que cubrir todo y ser prudentes, para que todos estén bien mirados, logrando una cercanía constante del paciente. Queremos crecer mucho más de lo que lo estamos haciendo», añadió.
Por otro lado, la directora resaltó el trabajo puntilloso para que todo funcione: «Cuando las cosas se piensan y analizan tanto, se desarrollan bien. Hay imprevistos, pero estamos acostumbrados. Si algo falla, se puede resolver. Aderid tiene un crecimiento fuerte. La comunidad siempre nos ha ayudado. Hemos logrado tantas cosas que estoy segura de que todo funcionará bien y será muy bueno para los vecinos».
El último tramo del año
En otro aspecto, informó que Aderid está trabajando en el armado del almanaque 2025, sacando fotos a concurrentes y terapeutas para organizarlas de acuerdo a las celebraciones, cada mes, del próximo año. «Está bueno. Fue un trabajo muy lindo», aseveró la directora.
En simultáneo, trabajan en un proyecto para estampar gorras que se trabajó todo el año, pero se da a conocer ahora con mayor fuerza laboral. «Tenemos casi cerrados los ingresos», reveló Campana.
El objetivo es comenzar el año con las aprobaciones de las obras sociales para los chicos que deben ingresar. Esta planificación «es engorrosa, pero sirve mucho».
Campana hizo referencia, por otro lado, a la meta de hacer una buena tarea en la colonia de verano. «Siempre estamos con mucho movimiento. Parece que el año va a terminar pronto. Pero, a esta altura, ya proyectamos para el ciclo que viene. Uno siempre quiere dar respuesta. Venimos bien, pero con mucho trabajo», cerró.
