Entre otros temas de agenda, desde la Cooperadora están evaluando llevar adelante un proyecto que se traduciría en un beneficio muy grande para la comunidad, destinado a una mayor facilidad de traslado de pacientes a distintos centros médicos de otras localidades. «Vemos opciones. Sería algo muy lindo. Pero todavía no queremos develar nada, no por misterio, sino para atinar detalles del proyecto en sí», explicó Cuenca.
En cuanto a la tradicional rifa de la Cooperadora del Hospital, dijo que «seguirá vigente hasta mayo del año próximo, ya que coincide con la finalización de nuestro mandato, que será en julio del 2025». Sin embargo, aclaró que aún falta definir cuál será el destino de la rifa. «Todo está por verse, de acuerdo a lo que haga la gente que tome la comisión. La rifa tiene mucho apoyo y conciencia de la comunidad», agregó.

Un cierre de año positivo
«Como nos viene pasando hace mucho tiempo, el cierre de año está siendo positivo. Hemos hecho todos los esfuerzos para trabajar apoyando al Hospital, con compra de insumos, equipamiento y necesidades», manifestó Cuenca. Y agregó que, tanto el servicio médico como la comisión, se han mostrado contentos por el trabajo realizado en el 2024.
Al mismo tiempo, recordó que también hay un grupo de trabajo que se encarga del geriátrico, que pertenece al Hospital: «Hemos puesto todas las energías posibles para que nuestros abuelos estén como lo requieren y necesitan. Hicimos inversiones, como compras de insumos y ventiladores; y nos abocamos a fortalecer las clases de kinesiología, terapia o educación física. Creo que los abuelos están conformes y con una atención necesaria».
El grupo de trabajo
«Estamos cumpliendo con lo que nos proponemos, siempre tratando de mejorar. Venimos trabajando como en el último tiempo. Hay un grupo sólido de gente», dijo el tesorero de la Cooperadora. Y enfatizó en el crecimiento que mostró la comisión en más de siete años de vida.
En este sentido, habló sobre la renovación de autoridades del año próximo: «Creo que es necesaria. Quizás, la falta de interés a la hora de involucrarse y la carencia de tiempo para dedicarse a la comisión, es un problema generalizado. Las instituciones necesitamos gente, pero cuesta».
La comisión, que trabaja ad honorem, se caracteriza por un funcionamiento articulado: «Todo suma, desde cualquier cargo. La idea es no centralizar las decisiones y trasladar las medidas al resto. Lógicamente, hay áreas con más peso. Pero queremos que cada uno aporte desde lo que pueda, para resolver situaciones. Lo importante es que todos trabajen», sostuvo por último.