22 C
General Villegas
viernes, diciembre 6, 2024
spot_img

Ingeniero se coronó campeón del Octogonal, en una final para el infarto

spot_img

Ganó en Banderaló y sufrió en Villegas, donde recibió dos goles sobre la hora, pero se impuso en los penales. Gran momento del equipo de Benavídez. Volverá a cruzarse con Atlético para ver quien llega a la gran final del año, donde espera Santa Rita

Nada había pasado e Ingeniero ya ganaba. Quién si no, Eloy Roigé escapó y salió de festejo, como en la ida en Banderaló, como en treinta y tantas veces en la temporada.

Estupor en el Malbrán. Con el correr de los minutos, continuaron los inconvenientes defensivos en el dueño de casa. El Rojo aprovechaba las desatenciones del fondo villeguense y lastimaba con la velocidad de Lucas Mhamed.

Pero después de tanto sufrimiento, el León reaccionó. Tiro libre pasado de Nicolás Trecco para la aparición de Kevin Leguizamón sobre el segundo palo. El centrodelantero se elevó sobre su marcador y con un cabezazo cruzado rompió la imbatibilidad de Juan Fernández. 1 a 1 y de vuelta a empezar.

La conquista de Leguizamón envalentonó a Atlético, que se adueñó de la pelota e insinuó constantemente cerca del área rival. El trámite se tornó en un ida y vuelta constante, en donde ambos intercambiaron ataques.

Y en el mejor momento del local Ingeniero propinó un nuevo golpe sobre la mesa. Todo nació con una falta a Omar Pires (¿o pisó la pelota?) cerca del área que Mariano Díaz aprovechó con un violento derechazo, al palo del arquero. 2 a 1.

Enseguida, un zapatazo del juvenil Martínez casi sorprende a Fernández y deja las cosas en tablas una vez más. Era intenso, era una final.

Tras el descanso, Gamarra por Ledesma y con dos nueve, a buscar, a llenar el área de gente, fue la receta de Atlético. Pero en fútbol, a veces, llenar la cancha de delanteros también limita los espacios que necesitan para moverse.

Ingeniero, ya sin Mhamed, lesionado, buscaba dormir la pelota lejos de su arco. Con otra actitud, aunque apurado, el local se jugaba todo a un pleno que lo pusiera en partido. Dos goles abajo en el global, se adelantó en la cancha.

Paz, Martínez, Leguizamón, Díaz. Todos querían, nadie podía. Y más cambios. Aicarde por Valdés y Juan Martínez por Díaz. Uno más para buscar por arriba y el otro Martínez, el de los goles sobre el final. El banco hace rico a este Atlético, de tantas variantes.

Ingeniero no podía salir del asedio, pero dejaba piel y pulmones en cada mano a mano, en cada cruce, en cada salto, en cada carrera. Fernández, sentido o no tras un corner, le puso hielo a tanto fuego. Un respiro para el Rojo.

La Academia bajó su intensidad y Roigé ganó un corner que fue festejado como un gol. A la vuelta, un fallo de Córdoba la dejó a los pies de Leguizamón, que falló cuando se imponía el grito de gol.

El reloj apuraba al local. Llegaba la media hora y la visita, cansada, se aferraba a sus ahorros. Russo mandó al pibe Bracciale y al veterano Delgado a la cancha. Mil jugadores ofensivos, pero espaldas desprotegidas. ¿Lo empata Atlético a los empujones o lo liquida Ingeniero de contra?

Lo tuvo Delgado, en una oportunidad clarísima. Atlético era más, pero el gol no llegaba. Roigé, siempre Roigé, amenazaba en el otro área. Y Stella, en otra muy clara, casi lo sentencia. Enseguida Avallay, en un cierre oportuno, evitó el tercero. Fernández le sacó el gol al Chiqui Martínez.

La expulsión de Córdoba le devolvió a Atlético la ilusión del gol, que buscó toda la tarde. Y el empate de Martínez, el de los goles agónicos, a los 49 de 54, el empujón que necesitaba.

¡Qué final! Enésimo centro sobre el área de Ingeniero, a nada del cierre, y Paz, de cabeza, a los 53 minutos elevó el 3 a 2 a categoría de milagro. Los penales, a la vuelta de la esquina.

Sergio Alegre, gol. Mariano Díaz, gol. 1 a 1.

Chiqui Martínez, gol. Roldán, gol. 2 a 2.

Paz, palo. Stella, gol. Ingeniero 3 a 2 arriba.

Leguizamón, gol. Roigé, gol. Ingeniero lo gana 4 a 3.

Delgado, gol. Pires, gol. Ingeniero 5 a 4.

Fue de Ingeniero, que festeja, que viene de menor a mayor, que hizo un gran Octogonal, que va por más. Gran final de campeonato. ¡Y que viva el fútbol chacarero!

*****

Atlético Villegas 3 (Kevin Leguizamón, Juan Cruz Martínez y Ezequiel Paz)

Franco Costanzo, Carlos Aballay, Ezequiel Paz, Felipe Martínez (Federico Delgado), Joaquín Inda, Elián Valdés (Enzo Aicarde), Nicolás Trecco (Thiago Bracciale), Mateo Ledesma (Nicolás Gamarra), Kevin Leguizamón, Sergio Alegre y Nicolás Díaz (Juan Cruz Martínez). DT: Alejandro Russo.

Suplentes: Agustín Muñoz, Enzo Aicarde, Tomás Sánchez, Thiago Bracciale, Federico Delgado, Juan Cruz Martínez y Nicolás Gamarra.

Cambios: Nicolás Gamarra por Mateo Ledesma, Enzo Aicarde por Nicolás Díaz, Juan Cruz Martínez por Elián Valdés, Thiago Bracciale por Nicolás Trecco y Federico Delgado por Felipe Martínez.

Ingeniero White 2 (Eloy Roigé, Mariano Díaz)

Juan Fernández, Nicolás Roldán, Daniel Córdoba, Agustín Becerra, Gastón Jara, Mariano Díaz, Lucas Mhamed (Franco Stela), Omar Pires, Ignacio Duhalde (Franco Aliendro), Lucas Fernández y Eloy Roigé. DT: Leonardo Benavídez.

Suplentes: Franco Aicardi, Juan Pereyra, Santiago Tula, Franco Aliendro, Juan Bengoechea, Martín Lora y Franco Stela.

Cambios: Franco Stella por Lucas Mhamed y Franco Aliendro por Ignacio Duhalde.

Expulsado: Daniel Córdoba.

Árbitro: Martín Gubar.

Global final: Ingeniero 5 – Atlético 5 (Ganó Ingeniero 5 a 4 en la definición por penales)

spot_img