La Escuela N° 1 realizó su acto recreativo, como todos los años, frente al edificio de la calle San Martín, con una importante concurrencia de familias y vecinos.
«Es el tercer año que nos trasladamos a la calle, ya que si bien nuestra escuela es grande, no puede albergar a todas las familias, que son casi 500. Hicimos una muestra dinámica de lo que se trabaja de 1° a 6° año. En este contexto los docentes, junto a los profesores, organizan distintas representaciones», sostuvo la directora del establecimiento educativo, Patricia Matilla.
«En esta oportunidad fueron 16, en las que pudimos ver musicales de cuentos tradicionales como Pinocho, Los Tres Cerditos y Caperucita. También tuvimos circo criollo, donde los más chiquitos mostraron distintas destrezas o habilidades propias de nuestra tierra. Un recuerdo a nuestros primeros habitantes, con una representación también de los más chicos; y una leyenda representada por los alumnos de segundo ciclo», agregó.
«Tuvimos además esquemas corporales con distintos ritmos -continuó-. Hubo un homenaje por parte de los alumnos de 6° año al gran maestro y una canción interpretada por una alumna, acompañada por la percusión de cajones y la guitarra del profe ‘Manolo’. Y culminamos con tres presentaciones de los alumnos de 6°, en la que mostraron por última vez su distintivo con los colores de la escuela».
Matilla comentó además que la jornada estuvo acompañada por la cooperadora a través del servicio de cantina. «La idea siempre es recaudar, pero lógicamente la posibilidad de brindar a las familias la posibilidad de que tengan una cena incluida en el espectáculo, con precios muy accesibles».
Con un clima que acompañó la noche del acto recreativo, «la calle San Martín estaba repleta. Sinceramente fue hermoso ver la cantidad de gente que había», expresó la directora de la Escuela N° 1.
Por otro lado, agradeció a quienes permitieron la realización del evento. «En principio a la gente del corralón municipal, por armar y desarmar el escenario en tiempo récord, con predisposición; a la Secretaría de Cultura, que nos facilitó el sonido; y obviamente a las familias de la escuela y a los padres colaboradores que estuvieron en la cantina. Además, una vez que terminó el evento nos ayudaron a entrar sillas y dejar la institución en condiciones».
«Esperamos que el año próximo nos encuentre nuevamente haciendo muchas cosas, trabajando juntos y, como escuela, todo el personal les deseamos que tengan unas lindas Fiestas, que tengamos paz y amor por sobre todas las cosas», concluyó.