La médica del área de Epidemiología del Hospital municipal habló sobre los recaudos a tomar para evitar brotes de dengue en General Villegas.
En los últimos años, Argentina ha experimentado un aumento significativo en los casos de dengue, una enfermedad viral transmitida por mosquitos que puede generar complicaciones graves en la salud de quienes la contraen. Este incremento, especialmente marcado en varias provincias del norte del país, ha encendido las alarmas sanitarias y motivado a las autoridades a intensificar las campañas de prevención.
En General Villegas, la situación no es ajena a este fenómeno. Con la llegada del verano, las condiciones climáticas favorecen la proliferación del mosquito Aedes aegypti, vector responsable de la transmisión del dengue. La combinación de calor y humedad crea un ambiente propicio para su reproducción, lo que ha llevado a expertos en salud pública a advertir sobre la importancia de tomar medidas preventivas.
Las autoridades locales han instado a la población a ser proactiva en la eliminación de posibles criaderos de mosquitos. Es fundamental revisar y limpiar patios, jardines y cualquier espacio donde se acumule agua, como recipientes, macetas y neumáticos. Además, se recomienda mantener tapados los tanques de agua y cambiar el agua de los floreros al menos dos veces por semana.
Los síntomas del dengue, que incluyen fiebre alta, dolor de cabeza, dolor detrás de los ojos, dolor muscular y erupciones cutáneas, deben ser tomados en serio. Ante la aparición de estos signos, se aconseja consultar a un profesional de la salud de inmediato. La detección temprana y el tratamiento adecuado son esenciales para evitar complicaciones.
Desde el área de salud del municipio de General Villegas, se están llevando a cabo charlas informativas y campañas de concientización para educar a la población sobre la enfermedad y las medidas de prevención. Sin embargo, la colaboración de cada vecino es crucial para mitigar el riesgo de contagio. El dengue es una enfermedad que puede prevenirse, y la responsabilidad recae en cada uno de los villeguenses.
Medidas preventivas
Silvina Riat, del área de Epidemiología del Hospital municipal, habló con ACTUALIDAD sobre el desafío de afrontar una nueva temporada veraniega: «Se viene trabajando mucho desde provincia, a partir de junio o julio. Se preparó un plan de contingencia ante posibles brotes de dengue. La temporada arrancaría en febrero y se extendería hasta abril. Es la época donde el mosquito tiene la tasa más alta de reproducción y, por ende, donde el riesgo de infección está más latente».
La profesional aclaró que, actualmente, la comunidad se encuentra en una inter-fase, explicada como el paso anterior a la alarma temprana. También, comentó que aún no se han notificado casos sospechosos de dengue, mostrando un buen avance en relación al año anterior.
«La baja de casos nos permite prepararnos desde los recursos físicos, materiales y humanos. El gran objetivo es evitar, fundamentalmente, formas graves de dengue. Hay gente de salud que se está capacitando para detectar, de forma precoz, signos de alarma, así como tratamientos. Eso, mejora la evolución y pronóstico de la enfermedad», dijo.
Los focos importantes
Riat detalló que, ante un caso sospechoso, el primer factor determinante es el antecedente de viajes a zonas endémicas en los últimos 14 días, ya sea de Argentina u otros países. En ese contexto, recomendó evitar viajar a territorios como Brasil, Paraguay, Bolivia y Centroamérica. «Allí, hay un crecimiento exponencial. Me preocupa el caudal de gente que se va por las fiestas o vacaciones. La situación es preocupante. Hay gente que se vacuna por precaución por la fiebre amarilla, pero no alcanza», agregó.
En este sentido, contó que el síntoma más importante, en personas mayores de 5 años, es la fiebre aguda entre dos a siete días de evolución. A ello se le pueden sumar náuseas, vómitos, dolor de cabeza, dolor de ojos, dolor muscular y articular, sarpullidos y hasta glóbulos blancos más bajos de lo habitual. «Hay que estar atentos, para que no aparezcan signos de dengue grave», sostuvo.
Luego, puntualizó que el «sistema de defensa es fundamental. En el caso del dengue, puntualmente, lo que determina la evolución de la enfermedad es haberla contraído con anterioridad por un tipo de virus diferente al de la reinfección. Por eso, si la persona ya contrajo la enfermedad antes, se la vacuna, no para evitar que la tenga, pero sí para que no sea de forma grave», explicó.
El aporte de la comunidad
La importancia de que la comunidad se involucre y aporte su ayuda para evitar la propagación y brote de dengue, radica en varios factores claves que impactan directamente en la salud pública y el bienestar de la población.
Riat destacó, por otro lado, que la experiencia durante la pandemia de Covid-19 proporciona una base de las técnicas a seguir: «Las personas lamentablemente fallecieron en otro momento por dengue, debido a que no había pautas de alarma como para pensar en la enfermedad. Con el tiempo y los estudios, esto se modificó».
Actualmente, se apunta a tener un diagnóstico por turno, sumado a un relevamiento precoz, para evitar formas graves de contagio que compliquen la evolución de la enfermedad. «Protocolizar es fundamental. Si hay brote, tendremos la puerta de entrada de la guardia del Hospital a disposición. Se llamará zona de febriles y tendrá todos los recaudos posibles, para que la situación no se torne más difícil», agregó la médica del área de Epidemiología.
El aumento de casos
El aumento en el número de casos, tanto en Argentina como en el mundo, tiene que ver con los cambios del vector reproductor. La extensión del mosquito, que produce un ascenso de casos, se explica a través con los factores socioambientales, el traslado de personas a zonas endémicas, los asentamientos de la población sin una estructura realizada y, sobre todo, la baja conciencia ciudadana desde las indicaciones sanitarias.
«Eliminar el vector, es imposible», subrayó Riat. Y, a partir de eso, dijo que en 2023 se manifestó un crecimiento importante con respecto al año anterior y los que lo antecedieron. «Por más que uno tenga cuidados, la prevención pasa a la fase de la alerta temprana. Cuanto más tarde eso, nos dará mayor posibilidad de prepararnos y entrenar desde salud», concluyó.