En diálogo con Ovación, el joven futbolista oriundo de Metileo compartió sensaciones sobre su llegada al club, el inicio de torneo y el significado especial que tuvo su gol frente a Santa Rita.
El 2025 comenzó con viento a favor para Ingeniero White de Banderaló, y dentro de ese arranque prometedor hay nombres que rápidamente se ganaron un lugar protagónico. Uno de ellos es el del pampeano Albano Orueta, una de las incorporaciones que ya empieza a marcar diferencia en este equipo que sueña en grande.
«Vivo en Metileo desde siempre, es mi lugar en el mundo», contó Orueta, quien hasta el año pasado vivía en General Pico, pero para este torneo decidió apostar fuerte por Ingeniero. Su llegada se dio por intermedio de Guido Sacra, aunque inicialmente la intención era sumar tanto a él como a uno de sus hermanos. «Guido contactó a mi hermano, en realidad a los dos, pero al final vine yo solo», explicó. Cabe resaltar que Sacra lo dirigió en Ferro de General Pico.
Albano es uno de tres hermanos futbolistas, todos actualmente vinculados a Ferro de Pico. «Estuvimos los tres juntos en un par de partidos antes de venir, pero ahora ellos siguen allá», relató con orgullo, aunque con la humildad de no querer ponerse por encima de sus hermanos: «Creo que los otros dos están muy bien», mencionó quien rápidamente se ganó un lugar como titular en Ingeniero.
Ya integrado a la vida en Banderaló, Orueta remarcó la importancia de estar cerca del plantel durante la semana: «Entrenar juntos ayuda mucho, se armó un buen grupo». Y sobre el equipo en sí, no dudó: «Me encontré con un plantel muy bueno. Ya en estas primeras fechas uno se da cuenta de que estamos para cosas importantes».
El sábado pasado, en la victoria frente a Santa Rita, Orueta fue autor de uno de los goles del partido. Lo gritó con alma y vida, corriendo hacia el alambrado para dedicárselo a su familia. «Habían venido todos, o casi todos. Siempre que hago un gol se lo dedico a mi mamá, y ella estaba ahí», contó emocionado.
Si bien su puesto natural es el de extremo, hoy se desempeña como volante: «Estoy jugando más atrás, pero el equipo tiene muy buenos extremos y el técnico me ubica ahí. Me siento bien», destacó Albano.
Este domingo, Ingeniero enfrentará a FC Bunge, en lo que promete ser uno de los duelos destacados de la fecha. «Va a ser un partido complicado, pero queremos seguir sumando de a tres», cerró Orueta.
La historia de Albano recién empieza en la Liga de Fútbol de General Villegas, pero su nombre ya empieza a sonar fuerte. Talento, humildad y sentido de pertenencia: ingredientes clave para seguir dejando huella en un Ingeniero que no quiere bajarse de la pelea.