La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) alzó la voz con firmeza frente a la grave situación que atraviesa Hortensia, una localidad del Partido de Carlos Casares, que permanece aislada a causa de las inundaciones.
«En Hortensia, como en tantos pueblos rurales, merecen ser escuchados», reclamó la entidad. Con campos anegados, calles intransitables y sin suministro eléctrico, la comunidad enfrenta un aislamiento total. CARBAP destacó el caso de Cristina Raffaeli, productora rural de la zona, como reflejo de una realidad que afecta a numerosos habitantes del interior.
Mediante un comunicado difundido en redes sociales, la organización insistió en la necesidad urgente de atender las carencias de infraestructura en el ámbito rural. «Queremos visibilizar esta situación y poner en agenda lo que muchas veces se ignora: la infraestructura rural es urgente. Quienes viven en zonas rurales tienen derecho a educación, salud, conectividad, caminos transitables y servicios básicos», subrayaron.
Finalmente, CARBAP reafirmó su compromiso de seguir trabajando para que los pueblos rurales no sean olvidados. El reclamo es claro: respuestas concretas y políticas que incluyan de verdad al campo profundo.