El capitán de La Maquinita habló en la previa del duelo con Ingeniero White. Con 15 años en primera, Cano es el faro de un equipo joven que apuesta al semillero y que sueña con volver a dar el golpe en Banderaló.
Eclipse Villegas atraviesa un momento de transición, con un plantel plagado de juveniles y con la salida de los refuerzos que habían llegado desde Lincoln. En ese escenario, la figura de Maximiliano Cano, capitán y referente del club, cobra un valor especial. El mediocampista, que debutó en 2010 con apenas 17 años y hoy, a sus 33, acumula más de una década y media en primera, se ha convertido en el espejo en el que se miran los más jóvenes.
«Me hace sentir grande ver tantos chicos, aunque no lo sea tanto todavía. Trato de aportar lo que aprendí en mi carrera y transmitirlo a los pibes. Gracias a Dios me he ganado el respeto del grupo y eso para mí es un orgullo», contó Cano en su paso por OVACIÓN.
Orgullo y pertenencia
El volante no esconde lo que significa vestir la camiseta de los de Barrio Parque. «Para mí siempre es un placer, un orgullo. Juego en el club desde los siete años y hoy, con la cinta de capitán, siento que defiendo a mi casa. Es muy lindo ver cómo cada año siguen subiendo chicos desde las inferiores. Eclipse viene trabajando muy bien y los resultados se ven cuando esos chicos llegan a tercera y a primera», manifestó.
Cano remarcó además la apuesta de la institución por sus divisiones formativas: «Si tenemos chicos de 16 y 17 años jugando en primera es porque se están haciendo bien las cosas. No sé si es necesario traer refuerzos de afuera. El club invierte en inferiores y eso también es invertir en jugadores», señaló.
El peso de la cinta y el temperamento
Consultado por su rol como capitán, Cano fue claro: «Es una gran responsabilidad. No solo por hablar con los árbitros, sino porque hoy cualquier protesta te puede costar una amarilla que te condiciona el partido. En lo personal, siempre fui temperamental, he tenido amarillas y rojas por eso, pero todos saben que dejo todo en la cancha. Los que me conocen saben que juego hasta que no doy más», sostuvo.
Lo que viene: repetir el golpe en Banderaló
Tras el triunfo en el debut ante Blaquier, Eclipse se prepara para visitar a Ingeniero White, uno de los grandes candidatos al título. La Maquinita ya sabe lo que es sorprender en Banderaló: en el Clausura le quitó el invicto al Rojo tras 12 fechas.
«La verdad que soñamos con repetir. Vamos con la misma mentalidad y las mismas ganas. Hoy contamos solo con chicos del club y eso se defiende de otra manera. Uno cuando juega por lo suyo lo hace distinto. Ojalá podamos volvernos con los tres puntos», expresó Cano.
El capitán también destacó el buen presente físico del plantel: «Estamos bien, entrenando fuerte. En lo personal me siento en buen nivel y listo para lo que viene».
El estandarte de La Maquinita
Con 15 años ininterrumpidos en la primera división de Eclipse, Maximiliano Cano se ha convertido en sinónimo de esfuerzo, pertenencia y liderazgo. Ahora, rodeado de un plantel juvenil y con la cinta en el brazo, encara un nuevo desafío: guiar a La Maquinita en el Reducido y demostrar, una vez más, que el semillero del club tiene la fuerza necesaria para competir de igual a igual con los candidatos.
