En una nueva edición de Herencia Viajera, la propuesta que semana a semana invita a recorrer distintos rincones de Argentina y el mundo, Romina Domínguez llevó a los oyentes -y a los lectores de Actualidad- a un paseo imaginario por uno de los destinos más queridos del país: Mar del Plata. La charla comenzó evocando esa mezcla de sol, nubes y brisa fresca tan característica de la ciudad costera.
La elección no fue casual: se acerca el verano y también un nuevo fin de semana XXL, ideal para una escapada al mar. Pero más allá de su condición de clásico destino de vacaciones, Romina destacó que La Feliz -como se la conoce popularmente- es mucho más que playa y arena.
“Mar del Plata tiene muchísimo para ofrecer, para todas las edades”, aseguró. “Es una ciudad con historia, símbolo de vacaciones y de encuentro de las familias argentinas. Recordemos aquellos tiempos del Hotel Bristol, de los trenes que llegaban llenos de familias y de los sombreros elegantes. Esa mezcla de glamour y pueblo es parte de su esencia.”
Una ciudad con historia, arte y cultura
Romina recomendó especialmente viajar en los meses de noviembre o diciembre, antes del inicio de la temporada alta. “Son días largos, con clima agradable y menos gente en las playas. Se puede disfrutar más de la rambla y de los paseos sin el bullicio del verano”, explicó.
Durante la charla, recordó algunos de los atractivos más emblemáticos: el puerto, donde es tradición comer pescado fresco entre barcos rojos y gaviotas; el faro de Punta Mogotes, encendido por primera vez en 1891; o la Villa Victoria Ocampo, una joya arquitectónica que parece detenida en el tiempo.
También hizo referencia al Museo MAR, con su imponente escultura del lobo marino gigante, y a los teatros del centro, que en esta época del año permiten disfrutar de espectáculos con más tranquilidad. “Mar del Plata tiene una energía vibrante en temporada, pero fuera de ella conserva su encanto, su cultura y su historia viva”, señaló Domínguez.

Paseos, cafés con historia y una noche única
Entre los imperdibles de la ciudad, Romina mencionó los cafés tradicionales que conservan parte de la identidad marplatense. “¿Quién no fue alguna vez a tomar el té o a merendar al Boston o a La Guagua?”, preguntó.
La charla también derivó hacia la noche marplatense, con sus luces en la rambla, el casino central encendido y las calles Güemes y Olavarría repletas de bares, cervecerías y música en vivo. “Esa sensación de verano, de alegría, de querer quedarse un rato más, es muy de Mar del Plata”, comentó Romina.
Y para quienes prefieren un ambiente más tranquilo, la recomendación fue clara: escaparse a Sierra y Laguna de los Padres, ubicadas a pocos kilómetros, donde el verde y el silencio se combinan con la vista de las sierras y un ritmo pausado, ideal para un día de descanso.
Escapadas cercanas y propuestas para todos los gustos
La entrevistada recordó además que la ciudad está bien conectada con otros puntos de la costa. “Se puede llegar fácilmente a Villa Gesell, Necochea o incluso a Pinamar. Todo está relativamente cerca, y para los que no quieren manejar, hay buena conexión en colectivos. También es una opción para los jóvenes que viajan solos por primera vez”, explicó.
Mar del Plata, insistió, “es una ciudad para todos los públicos”. Si el clima no acompaña, sobran alternativas: recorrer sus centros comerciales, visitar museos, disfrutar de sus bares o hacer escapadas cortas a otros balnearios.

El sabor del mar y los clásicos de siempre
Fiel a su estilo, Romina no dejó afuera el costado gastronómico. “Nadie se va de Mar del Plata sin comer en el puerto. El pescado fresco, las paellas, las rabas con cerveza al mediodía… eso es parte del ritual”, dijo.
Y agregó una mención especial a los churros marplatenses, otro ícono de la ciudad. “Están en todas las panaderías, pero el clásico es Manolo. Los chicos van incluso después del boliche a comer churros con chocolate. Es una costumbre muy de allá”, mencionó.
Una escapada para recargar energías
Antes de despedirse, Domínguez invitó a aprovechar el próximo fin de semana largo para planificar una escapada. “El mar relaja, cambia la energía. Ir a tomar sol, respirar aire y compartir con familia o amigos siempre viene bien”, dijo.
Quienes deseen más información o quieran consultar sobre paquetes turísticos pueden comunicarse con Herencia Viajera al 3388-538273.
“Mar del Plata tiene de todo: historia, cultura, naturaleza, buena gastronomía y ese mar inmenso que siempre nos espera”, concluyó Romina.



