El defensor de Eclipse habló tras el agónico empate ante Ingeniero White y destacó el sentido de pertenencia del plantel, compuesto íntegramente por jugadores del club. Autor del gol en el minuto 97, Orlando analizó el momento del equipo, la política de apostar por los jóvenes y el sueño de seguir peleando por la clasificación.
Eclipse sigue dando muestras de carácter y compromiso. El último domingo, cuando parecía que la derrota ante Ingeniero White era inevitable, apareció Tomás Orlando para marcar el 1 a 1 en el minuto 97 y mantener viva la ilusión. «Nosotros teníamos claro que queríamos ganar, pero por suerte insistimos hasta el final y nos encontramos con el gol en la última», contó el defensor, que además lució la cinta de capitán en esa jornada especial ante la ausencia de Maximiliano Cano.
El empate, más allá del dramatismo, dejó sensaciones positivas en La Maquinita. «En el momento no tomé dimensión de lo que significaba el empate, pensé que solo servía ganar, pero después entendí que nos mantenía con vida. Estamos con mucha ilusión”, señaló Orlando, que subrayó el esfuerzo de un grupo joven que le jugó de igual a igual uno de los equipos con mayor jerarquía y recursos de la Liga.
«Le salimos a jugar de igual a igual al equipo que más invierte en la Liga, y eso es muy importante. Somos un plantel sub-22, con apenas tres jugadores mayores de 25 años, y eso habla de la apuesta del club por los pibes», explicó el defensor.
El sentido de pertenencia es un valor que atraviesa a todo el grupo. «Defendemos la camiseta del club en el que nos criamos. Todos somos hinchas, y eso nos da un plus que los demás no tienen. Siempre te queda guardado un poquito más por ese amor a la camiseta», destacó.
Además, Orlando remarcó la importancia del trabajo semanal y del compromiso colectivo. «Físicamente estamos muy bien, y el domingo quedó demostrado: el partido se jugó al ritmo que impusimos nosotros. Ellos también terminaron muertos de cansancio. Todo fue producto del esfuerzo», comentó.
Sobre su gol, el zaguero admitió que la emoción lo superó: «No me di cuenta del minuto, solo pensé en ir a buscar la pelota porque queríamos ganar. Después me cayó la ficha y fue una alegría enorme. Encima, con la cinta de capitán, algo que nunca me hubiese imaginado».
Ahora, Eclipse se prepara para el clásico ante Sportivo, con la ilusión intacta. «Sabemos que hay mucho en juego, pero vamos a ir a hacer nuestro trabajo. Si los resultados acompañan, mejor; y si no, quedarnos con la satisfacción de haber dejado todo. El domingo vamos a ir a matarnos ahí adentro», aseguró Orlando, con la convicción de quien siente los colores.



