Argentina logró la hazaña y avanzó en un clásico emocionante ante Brasil
El equipo de Pablo Aimar necesitaba ganar por tres goles y lo hizo: fue 3-0 y se metió en el hexagonal final.
Matías Palacios, el número 10 del seleccionado Sub-17 metió el gol del 2-0 ante Brasil que encendió la esperanza. Juega en las inferiores de San Lorenzo de Almagro y nació en General Pico. Es hijo de Braulio «El Chino» Palacios, un volante central que jugó para Sport de Tres Algarrobos cuando hace algunos años las ligas de General Villegas y del Oeste organizaron un par de torneos conjuntos.
La clasificación
Si la misión ya era complicada antes de iniciarse la última fecha de la fase de grupos, el panorama se oscureció aún más después del triunfo de Paraguay que dejó al seleccionado argentino sub-17 en jaque y con un pie afuera del Sudamericano que se disputa en Perú.
Es que debía ganarle a Brasil por al menos tres goles de diferencia para clasificarse al hexagonal final y mantener las chances de sacar pasaje al Mundial. Argentina lo hizo. De la manera más heroica posible, de la forma que más se disfruta: en un clásico y en tiempo adicionado. El 3-0 hace explotar a los chicos argentinos, el desahogo es enorme y el premio a confiar en la hazaña desde el primer minuto se hace realidad.
Ahora el equipo de Pablo Aimar se metió en el hexagonal final y buscará uno de los cuatro boletos a la Copa del Mundo.
Gran parte de la proeza se remite al arranque deslucido y con derrota 3-0 frente a Uruguay en la primera fecha del Grupo B. Eso dejó el camino cuesta arriba. El equipo de Aimar reaccionó y venció 2-1 a Colombia en la segunda presentación. Y el empate 2-2 ante Paraguay en la tercera fecha lo dejaba expectante aunque fuera de los tres puestos de clasificación a la ronda final.
En la previa del clásico ante Brasil, el triunfo de Paraguay 1-0 ante Colombia terminó de empantanar el camino. La Albirroja trepó a 7 unidades (+1) y sacó boleto al Hexagonal. Ya estaba adentro Uruguay, con los mismos puntos y + 3 de diferencia de gol. Y entre Argentina y Brasil se disputaban el lugar que faltaba.
Como el Scratch llegaba al encuentro final con mejor diferencia de gol, el equipo nacional no sólo debía ganarle para alcanzarlo sino conseguir al menos 3 tantos de diferencia para superarlo y meterse en la fase final.
El clásico fue de Argentina de principio a fin. Y lo que parecía imposible, con el correr de los minutos se volvió probable.
La esperanza argentina se encendió a los 37 minutos del primer tiempo con el gol de penal de Matías Godoy, el centrodelantero de Atlético de Rafaela.
Y tomó cuerpo en el segundo tiempo con expulsión de Diego Rosa que dejó a Brasil con un hombre menos a los 5 minutos y a los 10 con el golazo de Matías Palacios, el joven de San Lorenzo que clavó un derechazo perfecto desde afuera del área y dejó al equipo de Pablito Aimar a un gol de la clasificación heroica.
Argentina insistió, buscó por todos lados y generó situaciones muy claras ante un Brasil al que la clasificación al hexagonal no le cambiaba demasiado el panorama ya que está clasificado al Mundial de antemano por ser el país anfitrión.
Parecía que no había tiempo. Parecía que quedaba al borde de la heroica. Pero el grito del desahogo llegó ya con el tiempo de descuento, cuando las ideas se diluían, cuando sólo importaba tirar la pelota al área rival y buscar el gol salvador.
Aimar ya había mandado a Bruno Amione, marcador central de Belgrano de Córdoba, a buscar arriba. Y fue el pibe el que la empujó en el corazón del área chica y desató el festejo impresionante. Un triunfo que quedará grabado para siempre en la memoria de estos juveniles.
El Sudamericano otorga cuatro plazas para el Mundial de la categoría que se disputará entre el 2 y el 24 de noviembre en Brasil y para el que la Verdeamarela ya se encuentra clasificada por ser anfitriona. Fuente: Clarín.com
