Gustavo Santillán es el nuevo secretario del Concejo Deliberante. Quedó oficializado durante el acto de jura de los concejales, donde también se eligieron las autoridades del Cuerpo Legislativo.
El presidente del Concejo Deliberante, Juan José Tomaselli, le propuso formalmente ser el secretario del Cuerpo Legislativo. De esta forma, Santillán dejó de ser el secretario de Seguridad y volvió a un lugar donde pasó muchos años de su vida política.
«Estuve 8 años de concejal, hace más de 10 años. Para mí es volver a un lugar conocido donde pasé buenos momentos pero ahora con otra función diferente, como secretario. Estoy interiorizándome en todo el manejo interno para habituarme a esta nueva función. Es un gusto y una alegría que todos los concejales hayan confiado y dado el aval para que el presidente pudiera tener una persona de confianza. Estoy agradecido a José (Tomaselli) que me eligió para acompañarlo», comentó Santillán.
La salida de Santillán de la Secretaría de Seguridad era un rumor que sonaba muy fuerte durante la semana pasada y los trascendidos llegaron a los oídos del propio Santillán. Hasta que finalmente llegó la propuesta formal por parte del presidente del Concejo Deliberante, Juan José Tomaselli. «Después de hablar con él hablé con el intendente porque era algo que se había hablado políticamente. Acepté con gusto porque es un lugar que conozco, que puedo llevar adelante y puedo acompañarlo bien a José y al resto de los concejales. Espero trabajar con gusto con los concejales. Hay buena gente y creo que se va a poder dialogar, llegar a consensos y aprobar ordenanzas que le sirvan a la comunidad. Eso es lo importante», destacó.
En cuanto a su balance como secretario de Seguridad, Santillán sostuvo que «es positivo en una parte y con algunas cosas pendientes que nos quedaron por hacer: problemas en convivencia, en cuestiones de motos y camiones, cosas por resolver. Quedó en el lugar una persona conocida y amiga, como es Sandra (Ravera), que seguramente va a continuar. Yo la voy a acompañar en algunas cosas que quedaron pendientes, para ver si se pueden resolver esos problemas. Me voy bien, contento con lo hecho y con algún grado de insatisfacción por lo que quedó sin resolver».
