Comenzó en General Villegas, continuó en Banderaló y finalizó en nuestra ciudad. Un auto sustraído y prendido fuego, tres motos y una bicicleta robadas. Hubo cinco menores detenidos. Al cierre de nuestra edición las autoridades policiales mantenían hermetismo al respecto
Cinco menores de edad de entre 15 y 17 años fueron detenidos ayer por la policía, luego de ser los protagonistas de una madrugada de película.
Sin información oficial al respecto, dado a que las autoridades mantenían el hermetismo al cierre de nuestra edición (aparentemente trabajaban en otros hechos que podrían tener relación con los detenidos), se supo que un automóvil Fiat 147 fue robado a Matías Farías del frente de su domicilio, en el barrio Progreso de General Villegas.
Es el mismo vehículo que pasadas las 5 de la mañana se incendiaba sobre la Ruta 188, a pocos kilómetros de Banderaló, siniestro que requirió de la intervención de Bomberos Voluntarios del pueblo.
«Nosotros sólo intervenimos para apagar el fuego del auto y de la banquina, que había comenzado a incendiarse debido a las llamas que la alcanzaron», dijo una fuente consultada.
Al mismo tiempo, la policía de Banderaló perseguía a un grupo de menores que habían sustraído tres motos y una bicicleta en la localidad. Al llegar a Elordi, se pidió apoyo a la estación de policía local y los adolescentes finalmente fueron detenidos en General Villegas.
Dos motos fueron recuperadas. Una Corven 110 cc. de color roja, perteneciente a Marcos Diaz; y una Motomel 200 cc. Cross, propiedad de Santiago Veliz. También se recuperó una bicicleta que le habían llevado a otro vecino de la localidad.
Pero restaba encontrar un tercer rodado sustraído, marca Zanella 110 cc. de color negro, que aparentemente habrían abandonado por quedarse sin combustible.
Llamativo y preocupante raid delictivo que tuvo como protagonistas a varios menores de nuestra ciudad; y que se suma a otro auto robado esta semana a Jorge Aguilera -también en General Villegas-, que pasadas unas horas del hecho se encontró incendiado en su interior en la zona rural de Emilio V. Bunge.
