Walter Sánchez, Oficial Ayudante de Escuadra de Bomberos Voluntarios de Bunge, habló con FM Actualidad e hizo un exhaustivo detalle de todos los destrozos ocasionados por el vendaval.
Bunge fue una de las localidades más castigadas por las violentas ráfagas de viento del temporal que azotó a una buena parte de nuestro distrito. Se registraron voladuras de techos en cuatro o cinco viviendas, hubo árboles que fueron arrancados, calles anegadas, cables cortados y un galpón del ferrocarril que fue completamente destruido.
Walter Sánchez, Oficial Ayudante de Escuadra de Bomberos Voluntarios de Bunge, describió el panorama post tormenta como «desolador».
«A las 2 de la mañana, aproximadamente, fue el pico más alto de la tormenta. Empezamos a recibir llamados de personas que estaban sufriendo voladuras de techos, pero nosotros tenemos prohibido salir en el momento del siniestro por una cuestión de seguridad. Apenas empezó a detenerse el viento respondimos los llamados de gente que necesitaba ser auxiliada de forma inmediata. No fue nada grave en el sentido de lamentar alguna víctima, pero las casas recibieron tan fuerte impacto del viento que les arrancó el techo de cuajo», expresó.
«El pueblo era otro hoy (por ayer) a la mañana. Hasta las 5.30 estuvimos tratando de liberar las calles por los cables y árboles caídos. Destrozó plantas enormes, que era impensable que destroce. A un galpón del ferrocarril lo aplastó como a una latita. Hacía muchos años que no se veía un daño así», detalló Sánchez.
Alrededor de cinco casas registraron voladura de techo, así como también hubo viviendas en los que se produjeron daños menores.
«Había calles con cables cruzando, donde no había cables había plantas, algunas calles estaban anegadas con agua. Fue muy complicado. Causó mucho daño. Es desolador. Ahora hay que acomodar todo el desastre después de este siniestro», concluyó Sánchez.