Hace unas semanas lo sufrieron una veintena de árboles que el municipio había plantado en la ampliación de la laguna del Parque, recientemente anexada a la histórica.
Hoy la víctima fue uno de los que fueron plantados en la Plaza San Martín.
«Fueron unos mocositos», le dijo a ACTUALIDAD una vecina de calle Arenales. «Estoy muy enojada», redondeó la idea, con la cual coincide todo el barrio.
Aún así el paseo público luce hermoso, renovado, y muchos villeguenses concurren a toda hora a pasear, jugar, caminar y correr.
Incluso un vecino de calle Paso, por sus propios medios, colocó en cada árbol la clásica protección de goma espuma para que no sean víctima fácil de las hormigas. Asumir el compromiso, que le llaman.
Falta que «los mocositos» lo entiendan. Nada más ni nada menos. Ellos también son parte de la solución.
